El Colegio de Profesionales de Trabajo Social (CTPSPR) volvió a denunciar la falta de trabajadores sociales en el Departamento de la Familia y su baja compensación, que impide el reclutamiento necesario para atender los miles de querellas de maltrato.

La denuncia fue validada ayer, martes, durante una vista pública de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Representantes cuando personal del Departamento de la Familia aceptó que existen sobre 10,000 querellas de maltrato sin investigar y que las Unidades de Investigación Especializada que atienden esas querellas están funcionando con menos de 100 profesionales del trabajo social.

En la vista, además, se confirmó que, en las oficinas locales, las profesionales del trabajo social laboran con entre 30 y 40 casos de familias para darle seguimiento y atender la complejidad social que enfrentan.

Según el CTPSPR, Familia aceptó que no cuentan con profesionales del trabajo social y que cada día tienen menos personal. Aunque tienen procesos de reclutamiento activo, no consiguen reclutar el personal que necesitan.

A preguntas del representante del Partido Independentista de Puerto Rico (PIP), Denis Márquez, representantes de las agencias aceptaron que el salario base para estos profesionales es de $1,300 mensuales y con una diferencial llega a unos $1,700. Cuando se confrontó con los planes de reclasificación, la encargada de Recursos Humanos indicó que la misma llevaría el salario a un poco más de $1,900.

“Nuestra organización denuncia que se intente proyectar que las profesionales del trabajo social no quieren laborar. Lo que no quieren los profesionales del trabajo social son las condiciones precarizadas que le brinda el Departamento de la Familia para ejercer su labor”, expresó el presidente del CPTSPR, el doctor Larry Emil Alicea Rodríguez.

“Es importante destacar que el salario que tendrían nuestras profesionales trabajando en megatiendas es mayor al que le puede ofrecer el Departamento. A estos salarios se le añaden falta de supervisión, lugares hacinados e inadecuados de trabajo y una falta de sensibilidad de la agencia para atender las complicaciones que provocan las condiciones de trabajo precarizadas”, agregó.

El CPTSPR propuso que, de aumentar los salarios básicos, se resolverá la situación de reclutamiento y se garantizarán condiciones dignas de trabajo, por lo que consideraron que no deben ser menores a los $3,700.

Además, señalaron que es indispensable asignar recursos para remodelar los espacios físicos, garantizar la confidencialidad, fortalecer el componente de supervisión, bajar la carga de casos por profesional y asegurar condiciones laborales seguras y dignas.

“Como hemos planteado de manera histórica, las condiciones de trabajo dignas inciden en la calidad de los servicios que se prestan. Nuestra niñez y adultos mayores requieren agilidad en la prestación de servicios sociales. Ha llegado el momento de que cesen las vistas públicas y las promesas. Es momento de asignar los recursos. Abril es el Mes de la Prevención del Maltrato a la Niñez. Es maltrato institucional dejar sin recursos adecuados y suficientes a la agencia gubernamental que viene llamada a velar por el bienestar de este grupo poblacional”, reiteró Alicea Rodríguez.