La exsecretaria de Hacienda, Teresita Fuentes, renunció a un jugoso contrato que había firmado con la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) la pasada semana.

Como contratista de la Junta, la exjefa de agencia ganaría $30,000 mensuales, por un máximo de tres meses, además de otros beneficios como el pago por gastos de viajes y comidas.

Las tareas de Fuentes incluían monitoreo de legislación congresional, evaluar la interacción de éstas con las leyes contributivas estatales, examinar las necesidades de sectores de la manufactura, incluyendo el farmacéutico, y preparar análisis económicos para la JSF.

En declaraciones escritas a El Nuevo Día, la contable dijo que su salida responde a un mensaje de texto “con tono amenzante” que recibió ayer del presidente de la JSF José Carrión III. Según la funcionaria, en el mensaje, Carrión III le senaló una columna de opinión escrita por ella hace varias semanas sobre las acciones de la Junta para atraer empresas de manufactura a la isla.

“Nunca en mi vida profesional en el sector privado he sido amenazada por mis opiniones. Estoy acostumbrada a que mi opinión sea tomada en consideración en la toma de decisiones y que cuando la misma difiere de la de otros, se discutan los pros y los contras en un marco de respeto. Desgraciadamente, en esta instancia eso no ocurrió”, manifestó Fuentes, sin especificar en qué consistía la supuesta amenaza por parte de Carrión III.

“Dado este acercamiento de parte del Presidente de la Junta, y en ánimos de no afectar esta gesta tan importante para Puerto Rico, hoy 13 de abril de 2020 le comuniqué a la directora ejecutiva Jaresko mi intención de prescindir del contrato, mediante el cual aún no se han facturado servicios”.