Fortuño regaña a maestros que no se callaban mientras él hablaba en asamblea
El Gobernador recibió una fría bienvenida cuando arribó cerca de la 1:00 p.m. al salón donde se efectuó la actividad.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 13 años.
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Comúnmente son los maestros quienes imparten disciplina en las aulas, pero hoy, lunes, fue el gobernador Luis Fortuño quien "regañó" a algunos miembros de la clase magisterial que no guardaban silencio mientras se dirigía a los participantes en la asamblea de la Asociación de Maestros.
Fortuño recibió una fría bienvenida cuando arribó cerca de la 1:00 p.m. al salón donde se efectuó la actividad en el Hotel Caribe Hilton, y durante su intervención, en la que repasó sus principales proyectos educativos, fueron múltiples las ocasiones en las que los organizadores tuvieron que pedir silencio para que el primer ejecutivo pudiera completar su alocución.
Sin embargo, al cierre de su participación, un maestro reclamó mejores condiciones salariales para los docentes, y cuando Fortuño comenzó a contestar haciendo referencia a la situación fiscal en la que encontró al gobierno cuando asumió el cargo en el 2009, los presentes hicieron patente su malestar, y el gobernador tuvo que intervenir y pedir silencio y respeto.
"Ustedes son la profesión más importante que tiene Puerto Rico, y cuando esto pasa en el salón de clases... Yo digo las cosas como son. Es hora de que aquí se le dé el respeto que se merecen los seis (candidatos). Al pan, pan y al vino, vino", manifestó Fortuño.
Entre sus obras, el gobernador resaltó el proyecto de mejoras de las Escuelas del Siglo 21, el que se concediera permanencia a sobre 4,000 docentes, que se designaran 1,300 facilitadores nuevos para el programa de Educación Especial, y que se establecieran prácticas fiscales más estrictas en la agencia.