La representante Maricarmen Mas Rodríguez anuncia en un comunicado de prensa que, luego de un abarcado estudio, es viable establecer un programa de desarrollo ecoturístico y de investigación en ciencias naturales y marinas en la Isla de Mona.

Especial: un corazón llamado Mona

“En el 2017 comenzamos a evaluar la posibilidad de que parte de la Isla de Mona pueda ser utilizada como plataforma de ecoturismo con el propósito de impulsar el desarrollo económico en la región oeste, así como la creación de nuevas empresas y puestos de trabajo. Luego de esta investigación, podemos concluir que en efecto, es viable este tipo de actividad y la misma es cónsona con los parámetros del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA)”, señaló Mas Rodríguez, quien representa el Distrito #19 de Mayagüez y San Germán.

Las expresiones de la también presidenta de la Comisión para el Desarrollo Integrado de la Región Oeste surgen luego de que la Cámara Baja acogió anoche el informe final de la Resolución de la Cámara 230 la cual ordenaba una profunda investigación sobre el potencial ecoturístico de la Isla de Mona.

Durante el proceso de evaluación, el DRNA explicó que, bajo su autoridad, ya existe en Isla de Mona actividad ecoturística limitada de recreación pasiva para el disfrute del público en general. Por ejemplo, se permite acampar en varias playas, excursiones, buceo, “snorkeling”, “hiking'”, avistamiento de aves, entre otras actividades. Estas actividades respaldadas por el Departamento requieren la expedición de permisos y el pago de aranceles

“El DRNA nos expresó que favorecen establecer un programa de desarrollo ecoturístico y de investigación en ciencias naturales y marinas en la Isla de Mona. En particular, sostienen que la medida impulsa un desarrollo sostenible de las islas, a la vez que asegura la protección de sus recursos naturales. Sin embargo, comentan que es imprescindible que se efectúen estudios comprensivos de planificación y evaluación estratégica, aunando esfuerzos de diversos sectores, para maximizar el potencial de la Isla de Mona como un centro de investigación científica y ecoturismo de nivel mundial, siempre anteponiendo el interés de conservación de tan importante reserva natural”, añadió Mas Rodríguez.

Actualmente las principales actividades recreativas que se dan en Mona incluyen acampar y la caza regulada de cerdos y otros animales no endémicos que fueron introducidos por colonos españoles. La Isla también se conoce coma un lugar para hacer buceo y espeleología. Los visitantes llegan a Mona a través del servicio de operadores de botes rentados. En el presente, solo hay dos concesionarios autorizados a ofrecer excursiones (tours) a la Isla de Mona. Estos son: “Adventure Tourmarine” y “Big Red”.

En cuanto a infraestructura recreativa, Mona tiene dos áreas designadas para acampar. A saber, Playa Sardinera en el Noroeste, y Playa Pájaros en el Suroeste. Además, el antiguo Faro de Mona es un lugar de interés para las visitantes.

Por su parte, la Compañía de Turismo de Puerto Rico estableció durante el proceso de vistas públicas, oculares y ejecutivas, que debido a que Mona es una isla deshabitada por lo cual carece de infraestructura. Si se fuera a crear una eco-hospedería, el desarrollador tendría que suplir la infraestructura necesaria para satisfacer la necesidad de sus huéspedes.

Asimismo, el desarrollador tendría que usar placas solares para proveer energía eléctrica, establecer una planta desalinizadora, o si es posible, obtener una franquicia para hincar un pozo, establecer un sistema sanitario y buscar la forma de remover de la Isla material reciclable y no reciclable, entre otras cosas.