La empresa Crowley inauguró esta mañana una instalación de carga de gas natural licuado (GNL) en su sede en Peñuelas.

Se espera que la instalación proporcione más de 94 millones de galones de combustible alternativo al año a industrias clientes mientras construyen resiliencia dentro del sistema de suministro de energía de la Isla.

“Operando en plena capacidad de distribución, (esta facilidad) ayudará a producir 120 megavatios de energía limpia y contribuirá a reducir las emisiones de dióxido de carbono y azufre”, explicó Matt Jackson, vicepresidente de desarrollo empresarial de Crowley Transporte marítimo y nueva energía. “Esto es un momento histórico. Estamos aquí para proveer soluciones renovables de energía”, celebró.

“Es importante que empecemos a visualizar al gas natural como una energía de transición, como una energía para generación base. Queremos pasar a renovables, lo vamos a hacer, pero eso no ocurre de un día para otro y en lo que se da esa transformación para depender única y exclusivamente de energía renovable, necesitamos tener un sistema generatriz que supla las necesidades de nuestro pueblo y que cumpla con los requisitos de emisiones que impone la EPA (Agencia de Protección Ambiental)”, manifestó el gobernador Pedro Pierluisi.

Según detalló el director ejecutivo de la empresa Tom Crowley a Primera Hora, el GNL representaría ahorros “significativos” para las empresas que inviertan en el GNL, que abarcan los sectores farmacéuticos, manufactureros, alimentarios y las industrias tecnológicas.

“La traducción (de los 94 millones de galones) a dólares realmente viene con la posibilidad de que nuestros clientes produzcan energía a un precio más bajo. Entonces, nuestros clientes justifican sus inversiones en GNL en base al ahorro de costos que generarán en los próximos 10 años y el ahorro de costos es significativo”, respondió a este diario.

La instalación, además, creó 50 nuevas plazas de empleo directos, sumándole a los 350 que tiene la empresa a nivel Isla. También, el director ejecutivo indicó que se generaron un sinnúmero de trabajos indirectos, como la contratación de obreros de construcción.

El alcalde peñolano, Gregory González Souchet, concordó que la nueva instalación ha ayudado a “catapultar” la economía de su pueblo, la cual fue severamente afectada por el impacto de los seísmos del 2020.

“Las tasas de desempleo han disminuido considerablemente. Hace dos meses estábamos en un 9.8 de desempleo y para el pasado mes ya estábamos en un 8.1″, afirmó.

“Es un gran día para el desarrollo económico en Puerto Rico y en el suroeste que tanto necesita el desarrollo económico y a recuperación”, coincidió la comisionada residente Jenniffer González, quien asistió a la inauguración.

Aunque no especificó la cantidad, Crowley auguró que la inversión para la instalación de carga de GNL en Peñuelas rondaba en varios millones.

“Hay muchas industrias y comercios que están llevando a cabo proyectos de cogeneración. Es decir que generan energía en sus facilidades y entonces la utilizan para ahorrar costos. Eventualmente vamos a poder tener facilidades de cogeneración que entonces puedan vender energía a otros negocios, industrias que tenemos utilizando la red eléctrica que tenemos. Eventualmente esto va a ser como un mercado regulado por el Negociado de Energía y la generación no solo va a provenir de la Autoridad de Energía Eléctrica, sino va a poder venir de entidades privadas. Al momento, lo que hay son proyectos de cogeneración y esta nueva facilidad que aumenta básicamente la capacidad de almacenaje de gas licuado en Puerto Rico o la capacidad de traer gas licuado a Puerto Rico para un alrededor de una sexta parte del gas licuado que está llegando a la isla va a ser una diferencia positiva”, dilucidó Pierluisi al indicar que “no es la intención de Crowley” que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) le compre gas natural.

Tras un acuerdo con Nanergy, la empresa adquirirá el GNL. Así, el gas licuado llegará en tanqueros mediante la facilidad portuaria del área, que es administrada por la Autoridad de Puertos y utilizada principalmente por la empresa adyacente EcoEléctrica. Luego, Crowley almacenará el GNL en tanques de EcoEléctrica y, de esta manera, pasará por tuberías hasta llegar al terminal que les suple el gas licuado a los camiones.

“Así que esto lo que va a causar es que Crowley va a tener una operación mucho más eficiente al distribuir gas licuado por todo Puerto Rico a sus clientes comerciales e industriales. Son buenas noticias para Puerto Rico”, sostuvo Pierluisi.

Con esta instalación, el Primer Ejecutivo descartó la posibilidad de que se instale un gasoducto, proyecto propuesto en varias ocasiones durante las décadas pasadas y que ha sido rechazado con vehemencia por las comunidades y líderes ambientalistas.

“No está bajo consideración un gasoducto. Eso no está ni tan siquiera bajo consideración. Ya sabemos la polémica que generó el gasoducto propuesto por el centro de la isla e igual manera el gasoducto del sur. Así que yo tiendo a evitar ese tipo de controversias a menos que no tenga alternativa, porque lo importante es que así la transformación, que ocurran cosas como ha ocurrido aquí hoy que es inversión privada para traer gas natural para propiciar el uso de gas natural que es limpio y es menos costoso que el diésel”, aseguró.

En el evento participó también el director de la Autoridad de Puertos Joel Pizá Batiz.