El Instituto de Ciencias Forenses (ICF) celebró hoy la graduación de una docena de nuevos peritos en serología, evidencia digital e investigación forense, que se espera se unan a las labores de la agencia.

Según se dio a conocer, los graduados han cumplido con uno o dos años de estudios y capacitación, según los estándares del organismo y otras instituciones internacionales.

La doctora María Conte Miller, directora del ICF, explicó que los peritos graduados en esta academia podrán realizar análisis forenses de manera independiente, lo que ayudará a reducir la cantidad de casos pendientes que se han ido acumulando a través de los años.

“Nuestro recurso humano, por ser uno muy especializado, es de difícil reclutamiento y no es hasta que completan sus respectivas academias que pueden certificar informes periciales y testificar en los tribunales”, comentó Conte Miller.

“Con este esfuerzo vamos a doblar la cantidad de personal en las áreas de balística y ADN”, afirmó la doctora. “¿Qué significa eso? Que van a hacer el doble de los análisis que están haciendo ahora”.

Aclaró que el problema de casos acumulados “no es exclusivo de este laboratorio”, sino algo que viene sucediendo en todos a través de los Estados Unidos, “porque no hay suficientes peritos forenses”.

Agregó que, para atender esa situación se están llevando a cabo esfuerzos como este en todos los laboratorios forenses.

“En nuestra historia reciente, hemos enfrentado grandes retos, pero en corto tiempo restablecimos la confianza en nuestros procesos y le hemos dado al pueblo y a nuestro sistema de justicia un mejor servicio”, sostuvo Conte Miller. “Tenemos hoy un Instituto acreditado que es modelo para otras jurisdicciones. Y en lo que hoy nos ocupa, nuestro recurso humano especializado, puedo garantizar que ningún perito privado cuenta con las credenciales, es auditado ni es objeto de control de calidad, como los que integran la fuerza laboral de nuestro Instituto de Ciencias Forenses”.

Como parte de la ceremonia de graduación, la doctora Conte Miller resaltó que los nuevos peritos recibieron entrenamiento en el uso de modernas tecnologías que ha adquirido el ICF y que agilizarán los exámenes forenses, tales como “Rapid DNA”, que permite identificar los cadáveres y procesar kits de violación en mucho menos tiempo de lo que conllevaba antes; “FARO”, un instrumento que “capta imágenes tridimensionales y medidas en las escenas criminales para la presentación de informes”; o el CT scan que permite hacer autopsias virtuales a través de imágenes, sin necesidad de hacerla de la manera convencional, que requiere la apertura del cadáver y la presencia constante del patólogo.

“Hemos graduado esta academia, que es un proceso estructurado y organizado, durante el cual estos peritos adquieren conocimiento muy especializado para hacer sus propios casos, para tener la responsabilidad de ellos mismos firmar sus casos”, abundó Conte Miller, agregando que, cuando el ICF recluta personal, “tiene que venir ya con una educación universitaria” y adicional a eso, “nosotros tenemos que impartirle unas academias internas que van desde seis meses hasta dos años”.

“Es un proceso un poco más complicado de lo que podría aparentar. No podemos traer gente de la calle y ponerlo a firmar casos de manera inmediata. Así que por eso el proceso de reclutamiento de un perito forense toma tiempo”, agregó la doctora.

Insistió en que haber completado esta graduación “es un gran logro”, ante la escasez de peritos forenses que hay, incluso más allá de Puerto Rico.

La directora indicó que la graduación se suma al esfuerzo de reclutamiento que vienen llevando a cabo por los pasados meses.

“Hemos reclutado 38 personas, entre peritos y personal administrativo durante este año. Y eso acompañado de los avances tecnológicos, pues obviamente esa ecuación da la agilización de los informes periciales, que es lo que perseguimos”, afirmó la experta.

Retención de talento

Conte Miller subrayó que tanto el reclutamiento como la graduación son “un efecto de que hemos podido hacer unas mejoras salariales, porque se nos asignó dinero para ese propósito. Y ahora mismo estamos haciendo un plan de retribución y reclasificación, confeccionándolo, que va a agregar un aumento adicional en algunas de las posiciones”.

Abordada sobre el tema de la fuga de talento, que ha afectado al ICF, indicó que “no creo en la retención involuntaria de la persona. Yo creo en la motivación interna y en el interés que esa persona tiene de trabajar en ese lugar. De parte de nosotros está proveerle un salario competitivo, y yo entiendo que nosotros dando los pasos necesarios para convertirnos en un patrono competitivo, y proveerles un ambiente de trabajo profesional, y por eso hemos adquirido tecnología de última generación y estamos remodelando todas nuestras facilidades”.

Conte Miller, poco antes de entregar los certificados, agradeció a los graduandos “porque han escogido el camino de la ciencia para hacer justicia”.

En la ceremonia se graduaron cinco peritos en serología forense, “lo que la gente conoce como el DNA (ADN)”; cuatro investigadores forenses, “que son los que van a las escenas del crimen”; dos en evidencia digital, “que son los que examinan los crímenes que ocurren de manera cibernética, videos, crímenes en computadoras y ese tipo de asunto”; así como una técnica de control y custodia.

“Me hace sentir sumamente orgullosa de que hayan escogido la ciencia para servir a la justicia”, afirmó la doctora, refiriéndose a los recién graduados. “Yo los exhorto a que continúen desarrollándose profesionalmente. Esto es un camino que requiere de disciplina, de persistencia. Pero el compromiso de parte mía hacia ellos es de proveerles las mejores herramientas de trabajo para que puedan lograr ese desarrollo. Y seguiremos luchando para lograr, y que ya hemos dado unos grandes avances en ese sentido, las mejoras salariales que necesitan para que nosotros logremos que se queden con nosotros hasta su retiro”.

Asimismo, envió un mensaje a potenciales futuros peritos forenses, y aseguró que “se siente un gran sentido de satisfacción cuando uno ve que su trabajo ayuda en la resolución de un caso, ayuda a hacer justicia, ya sea a desvincular un sospechoso de un crimen, como a vincularlo”.

“Esta una profesión interesante, además, y científicamente retante. Si a uno le gusta la ciencia, si a uno le gusta la investigación, y escoge esta profesión, ha escogido bien”, agregó. “Además que en el mercado laboral hay mucha oportunidad de empleo, porque hay una escasez de estos científicos”.

Llenos de motivación

Por su parte, Fabiola Fernández Padín, una de las nuevas peritas en serología, explicó que se inclinó por esta profesión, luego de sus estudios en ciencias biomédicas, por “la aplicabilidad, que ves en acción lo que uno hace diariamente, que uno sigue aplicando lo que aprendió en la universidad”.

“Y le damos a las familias, y a las víctimas, una parte de la clausura de sus casos. Le damos como esa finalidad y sustento, científicamente a esas víctimas”, añadió.

Mientras, Adalberto Díaz Zapata, nuevo perito investigador forense, indicó que tomó este rumbo profesional porque “me gusta lo que es la investigación en las escenas del crimen. También quiero ser parte de la justicia de Puerto Rico. Y como mencionó la doctora, también eliminar la acumulación de casos. Y es un trabajo bastante interesante, que me interesa y me gusta”.

Comentó que es un trabajo que, con el avance de las ciencias, evoluciona constantemente, y exige que uno “tiene que estudiar, actualizarse, para ir al paso de las ciencias, y que el trabajo se lleve a cabo al cien por ciento”.

Se refirió, con sentido de aprobación, a los recientes cambios en el ICF, y agregó que “espero verme por muchos años siendo parte del Instituto y parte de la división de investigadores forenses, y también ser parte del cambio, traer cambios para el trabajo y poder lograr nuestro propósito”.

Por su parte, Aixa Estrada Franco, la recién graduada técnica de control y custodia de evidencia, explicó que lleva 15 años en el ICF, donde por muchos años laboró como oficinista de sala de autopsia. Ahora, en su nuevo rol, explicó, “recibimos todas las evidencias recopiladas en las escenas. Y no solamente de las escenas, sino también de diferentes agencias que nos traen evidencia para ser analizada, los ‘safe kits’, lo que va para la sección de balística, la sección de evidencia digital, de toxicología, diferentes laboratorios del instituto. (Esa evidencia) la preservamos, según las bóvedas donde va cada evidencia, la custodiamos y la entregamos”.

Estrada Franco, quien ha sido líder de la unión de empleados del ICF, destacó el rol de la directora, la doctora Conte Miller en los avances en contrataciones y adquisición de tecnología y equipo para el organismo, y afirmó que la unión tiene una muy buena comunicación con ella.

“Estamos haciendo un trabajo arduo para conseguir un salario digno para los compañeros también. La doctora ha estado en la mejor disposición. Estamos ahora mismo trabajando para reclasificación. En cuanto a la tecnología y los equipos ha mejorado muchísimo. Y en muchas divisiones, en muchas secciones, han contratado más personal, que eso ha sido bien positivo”, comentó. “Estamos bien esperanzados, estamos contentos. Vamos mano a mano, la unión junto con la administración, verdaderamente vamos encaminados en una misma dirección”.