Los dos jueces juramentados hoy para tomar las riendas de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) no pudieron ofrecer garantías, pero aseguraron que hasta el momento no han identificado ninguna falla que impida que las elecciones generales se puedan celebrar el próximo 3 de noviembre.

El nuevo presidente de la CEE, Francisco Rosado Colomer y la presidenta alterna, Jessika Padilla Rivera informaron esta tarde en su primera conferencia de prensa al País que actuarán como una dupleta y que trabajarán junto con los comisionados electorales para devolver la confianza al pueblo puertorriqueño en el sistema electoral que quedó en entredicho en las fallidas primarias del 9 de agosto.

“Esto no es un comienzo ordinario como 1 de julio con varios años para poder prepararse para este evento. Sí tengo que decir que lo más importante es que todos con los que nos hemos tropezado tienen esa disposición y ese deseo de eliminar esa incertidumbre que tiene nuestro pueblo de que se lleve a cabo este evento el 3 de noviembre. Todos tienen la voluntad, por lo menos, así nos lo han dejado saber y todos parecen estar de acuerdo en que debemos devolverle la confianza al pueblo con lo que ha ocurrido en cuanto a los eventos electores”, dijo Rosado Colomer.

A la pregunta de si podían asegurar que los comicios generales no serán atrasados, el juez superior de Ponce sostuvo que ahora mismo “no ha podido identificar algo que me diga que (el evento) no se va a poder llevar a cabo”. No obstante, dijo que “el término asegurar es uno muy fuerte, que requiere que hagamos una evaluación un poco mayor sobre lo que es el proceso”.

“He dicho que de ordinario lo que se ve es hacer la marca en la papeleta y esto conlleva un andamiaje anterior que es lo que estamos evaluando, dónde está el proceso particularmente, porque hay unos procesos paralelos”, sostuvo.

Indicó que previo a la conferencia de prensa estuvieron reunidos con los comisionados electorales y con “el post master general” para saber de las alternativas de los votos por correo y el status de las papeletas. Añadió que también están trabajando en las certificaciones de los candidatos del Partido Popular Democrático (PPD), último en terminar el escrutinio de las pasadas primarias.

El magistrado dijo que buscan evitar que el proceso se paralice y si se detuviera, que lo puedan detectar a tiempo. “Hasta ahora lo que se me ha representado es que estamos en agenda, no ha habido un atraso en el calendario”, sostuvo.

La jueza Padilla Rivera dijo por su parte, que se han enfocado también en la comunicación, en que haya apertura con los comisionados, con cada uno de los departamentos "y con la ciudadanía para que sepa en qué etapa están”.

El juez reclamó que se trata de un proceso similar a otros años y sostuvo que las personas que tienen que ejecutarlo “saben cómo hacerlo, tienen la voluntad para hacerlo y a veces, lo que tenemos hacer es dar un poco de seguimiento”.

Añadió que también esperan porque una persona que trabajaba con el saliente presidente Juan Ernesto Dávila les entregue un calendario con un plan de trabajo.

Sobre las alegadas deudas con suplidores, el nuevo Presidente de la CEE dijo que todavía no ha podido corroborar si los pagos a la empresa Dominion, que tiene el contrato de las máquinas de escrutinio y a la imprenta que tiene a cargo las papeletas, se han hecho o están pendiente.

Ante los alegatos de que el nuevo Código Electoral quita poderes a los comisionados electorales, Rosado Colomer dijo que no ha podido comparar la reforma con la anterior ley, pero reconoció que podría haber impasses con los comisionados electorales. “Los comisionados están en el barco, están dispuestos a que esto se mueva, siempre van a ocurrir impasses, pero si coinciden en la mayor parte de las cosas nos va a dar a nosotros mucho espacio”, acotó.

“Queremos que esto vuelva a ser un proceso seguro, confiable y que el elector salga con la total y absoluta certeza de que su voto va a ser honrado y contado de una manera segura, confiada y que nos dé la oportunidad de en 55 días nosotros devolverle esa confianza”, dijo, por su parte, la presidenta alterna.

Padilla Rivera pidió tolerancia al País, pues dijo que tienen un reto de tiempo bien limitado.

“Una garantía quizás no podemos brindar, pero no vemos nada que nos haga pensar que no lo podemos lograr”, expresó Padilla Rivera, quien reside en Toa Alta y está asignada a una sala en el Tribunal de Primera Instancia de Arecibo.

Mientras, Rosado Colomer, quien reside en la Ciudad Señorial, donde atiende una sala en el Tribunal de Primera Instancia, dijo que viajará todos los días a San Juan.

Al ser preguntado en torno a si devengarán el aumento salarial que contempla el nuevo Código Electoral de un sueldo de $120 mil, equivalente al de un juez asociado del Tribunal Supremo, Rosado Colomer dijo que en “cuanto al salario que provee la ley, no veo razón para rechazarlo”.

Ambos jueces mantendrán sus puestos en la judicatura y los casos que tenían pendiente les serán asignados a otros jueces, mientras se desempeñen en la jefatura de la CEE, donde sus nombramientos están vigentes hasta el 30 de junio de 2021.