La Junta de Supervisión Fiscal (JSF) radicó este viernes el primer borrador del Plan de Ajuste de Deuda (PAD) de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) ante el Tribunal Federal para el Distrito de Puerto Rico.

En un comunicado de prensa, el organismo financiero expuso que el documento propone que los acreedores de la AEE emitirán nuevos bonos, por lo que los consumidores tendrán que asumir un cargo “híbrido” en la tarifa de conexión y el cargo “volumétrico”, es decir, según la cantidad de energía que se consume, en las facturas de electricidad por unos 35 años para atender la deuda de más de $9,000 millones de la corporación pública.

No obstante, el ente financiero asegura que “no ha puntualizado la forma en que se aplicará el cargo y su impacto en los hogares y empresas individuales, pero el cargo promedio según el Plan radicado será de aproximadamente la mitad de lo que les costaría a los clientes la deuda existente de la AEE durante el término de vigencia de los bonos”.

“Los residentes y las empresas de Puerto Rico simplemente no pueden pagar lo que algunos acreedores exigen en este momento”, señaló el presidente de la JSF, David Skeel, en declaraciones escritas.

“El tribunal nos ha solicitado que propongamos un Plan que le permita a la AEE continuar adelante y hoy estamos cumpliendo con esta obligación al proponer recortar la deuda de la AEE a niveles sostenibles, mientras dejamos la puerta abierta a futuras negociaciones. Esperamos encontrar un compromiso viable”, agregó.

Además, la JSF indicó que el PAD busca “ofrecer a los retirados de la AEE el mismo trato que a los retirados del Estado Libre Asociado en virtud del Plan de Ajuste del Título III del Gobierno de Puerto Rico”.

“Aunque el financiamiento con el que cuenta el Plan de Pensiones de la AEE es sumamente insuficiente, los retirados cobrarán por completo todos los beneficios devengados hasta la fecha de entrada en vigor del Plan”, indicó.

Según la Junta, el PAD propone recortar la deuda a un 48%, lo que redundaría en aproximadamente $5,400 millones y busca proporcionar “estabilidad financiera necesaria para invertir en un sistema energético moderno, resistente y fiable para Puerto Rico”.

“La quiebra frenó la transformación del sistema energético de Puerto Rico”, manifestó Skeel.

“El Plan que radicamos hoy (viernes) supone un gran paso adelante, pero no el último”, puntualizó, al tiempo que sostuvo que las negociaciones con los bonistas siguen en pie.

A principios de diciembre, la Junta informó que logró llegar a un acuerdo con los acreedores de la AEE que redujo el reclamo de la deuda que se tiene con los prestamistas de líneas de combustible en un 16%, lo que implicaría que dicho trámite vendrá acompañado de una emisión de bonos que será pagada, en parte, con un cargo que se impondrá a los abonados de la AEE en su factura. Dicha transacción sería efectiva en el momento en que se apruebe el PAD en el tribunal.

Por su parte, Justin Peterson, miembro de la JSF, indicó en declaraciones escritas que votó en contra del PAD.

“Voté en contra del Plan de Ajuste presentado por la Junta de Supervisión porque considero que trataba injustamente a los bonistas y se basaba en un análisis financiero elaborado para resolver un resultado deseado: pagar lo menos posible. El enfoque unilateral de la mediación por parte de la Junta de Supervisión fue decepcionante. Impidió un acuerdo global con todos los bonistas que estaba a nuestro alcance. Mientras continúe siendo miembro de la Junta de Supervisión, seguiré defendiendo los derechos de los bonistas que han recibido un trato indigno a lo largo de este proceso”, sostuvo Peterson.