El Departamento de Justicia investigará los hechos ocurridos el fin de semana pasado en el Cayo Matías en Salinas, donde se celebró una fiesta de espuma, actividad que puede haber ocasionado daños a especies protegidas en la zona y la vida marina en general, tras recibir un referido cameral a esos efectos.

“Confirmo que recibí en el Departamento de Justicia un referido de la Comisión de Recursos Naturales, Ambientales y Reciclaje de la Cámara de Representantes sobre una actividad celebrada en las aguas del cayo Matías. De inmediato, lo dirigí a la Oficina de la Jefa de los Fiscales para que se inicie una investigación de naturaleza criminal y se adjudiquen responsabilidades a quienes hayan incurrido en la comisión de delitos mediante su conducta”, manifestó el secretario de Justicia, Domingo Emanuelli Hernández, en declaraciones escritas.

Los hechos se conocieron luego que un vídeo en las redes sociales que mostraba las imágenes de decenas de personas festejando en él área natural, se hiciera viral en las redes sociales. En el video puede apreciarse como la espuma sale expulsada de una embarcación, mientras se hace uso de bebidas alcohólicas por los participantes, lo que provocó críticas.

Mientras, expertos en temas ambientales dijeron a Primera Hora que el impacto a especies como manatíes, corales y manglares puede ser significativo, no solo por el jabón y el alcoholo que fue a parar al ecosistema, si no por el hacinamiento humano, las descargas de las embarcaciones al mar, y la instalación de una tarima en el lugar.

La Secretaria del Departamento de Agricultura, Anaís Rodríguez Vega reveló que identificaron y citaron al organizador del evento, mientras el gobernador hizo expresiones en días recientes sobre el evento, que catalogó como vergonzoso. “Hay que proteger el ambiente, pero eso comienza en la casa, con la propia actitud”, dijo el mandatario.

Emanuelli Hernández también pareció hacerse eco de las expresiones del ejecutivo. “Los recursos naturales le pertenecen al pueblo puertorriqueño, pero deben disfrutarse con conciencia y responsabilidad. Cuidarlos y protegerlos no es solo una obligación del Estado, sino de cada uno de los que habitamos en la Isla. Los crímenes ambientales tienen un impacto severo en Puerto Rico y todos los ciudadanos, por lo que este caso tiene prioridad”, concluyó el secretario.