El Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico le pidió hoy al gobernador Alejandro García Padilla que destituya a los miembros de la Junta de Licenciamiento y Disciplina Médica (JLDM) por alegada "negligencia crasa" en el cumplimiento del deber.

En una carta abierta publicada en los principales periódicos, el Colegio sostuvo que las acciones de la JLDM no sólo han violado en múltiples casos la Ley 139 de 2008, la cual los fundamenta, sino también su reglamento, su propio código de ética, el código de ética del Colegio de Médicos Cirujanos y los cánones de ética gubernamental, así como, otras leyes y normas generales, derechos constitucionales, civiles y humanos.

"Con sus acciones, la JLDM ha atropellado a innumerables miembros de la clase médica, tanto en el ejercicio de la medicina como a indefensos médicos en formación, provocando inmerecida frustración y decepción, así como inmenso dolor y sufrimiento a miles de familias puertorriqueñas", dice la misiva firmada por el presidente del Colegio de Médicos Cirujanos, Eduardo Ibarra.

El dirigente del gremio indicó en la carta que el 4 de diciembre de 2013 la Junta de Directores del Colegio de Médicos Cirujanos determinó solicitar la destitución de los miembros de la JLDM.

Entre las razones para solicitar la destitución, el Colegio detalló que existe un “manejo caótico del proceso de renovación de la licencia médica y crasa negligencia en el manejo de expedientes”, “servicios pobres, incompletos y deficientes a los médicos, con un trato arrogante y despótico”, al igual que “publicación inadecuada de información sobre médicos, publicación inexacta sobre casos resueltos a favor del médico y divulgación inapropiada de la confidencialidad médico-paciente”.

El listado incluye, además, que no contestan las llamadas ni las devuelven, así como que existe un “caos en la regulación dinámica de las disciplinas, y mala fe en la evaluación y seguimiento a la acupuntura.

Ibarra también denunció que la JLDM realiza “acusaciones 'difamatorias' sobre funcionarios públicos y colegas médicos” y tiene “actuaciones con claro conflicto de interés”.

En cuanto a la administración del examen de reválida, el Colegio alegó que la JLDM abdicó en supervisar, examinar y establecer la nota de pase con base en elementos científicos mundialmente reconocidos.

Afirmó, además, que desde 2009 fracasa un número alarmante de aspirantes y en ocasiones el 100% de ellos, "debido a la incompetencia de la Junta para supervisar debidamente los proceso y seguir los mandatos de la ley", entre ellos, el mantener a un psicómetra analizando los procesos de examen.

Sostuvo también que la entidad no tiene un procedimiento estadístico estandarizado en la administración del examen de reválida.