Cerca de 300,000 personas que residían en Puerto Rico abandonaron el país para residir en los Estados Unidos, durante los cinco años entre el 2005 al 2009.

Mientras,  poco más de 160,000 se mudaron desde los Estados Unidos hacia la Isla, lo que  dejó un balance migratorio de cerca de 140,000 personas, concluyó un estudio publicado hoy por el Instituto de Estadísticas de Puerto Rico.

El estudio indica, además, que las estadísticas evaluadas sugieren que esa migración contribuyó a acelerar el envejecimiento de la población en los pasados cinco años de la década y redujo el nivel educativo del país, porque los emigrantes tuvieron un nivel relativamente mayor que los inmigrantes.

Las conclusiones se fundamentan en datos que ofrece la “Encuesta sobre la Comunidad” que publica anualmente el Negociado del Censo de Estados Unidos y la estadística que publican la Autoridad de Puertos y el U.S. Bureau of Transportation Statistics (BTS).

Ambas agencias recopilan datos sobre entradas y salidas del país a través de los aeropuertos de la Isla.

“Vivimos una década donde se han registrado menos estudiantes, menos escuelas privadas, menos compradores de viviendas, menos planillas radicadas, menos votantes, menos ingresos, menos gastos, en fin menos economía.  La emigración es un factor clave, sino el factor clave, que explica estos fenómenos”, sostuvo el director ejecutivo del Instituto,  Mario Marazzi-Santiago al comentar los hallazgos.