Las interrupciones espontáneas en el servicio de energía eléctrica fueron una de las razones que motivaron a Carlos Martínez, residente de Guaynabo, a ser una de las 5,733 personas que solicitaron esta mañana un boleto para la instalación de un sistema de placas y baterías bajo el Programa de Incentivo Solar del Departamento de la Vivienda.

“Hoy es un día que yo no tengo luz en casa. El área de Guaynabo es horrible. El sistema eléctrico es fatal y se nos va la luz todo el tiempo, que no debería ser así. Debería ser un sistema mucho mejor”, puntualizó a Primera Hora justamente al salir de la oficina en Las Vistas Shopping Center, en San Juan, donde hizo la solicitud.

Martínez explicó que esta ayuda los beneficiará significativamente, pues cuando él y su esposa hicieron el presupuesto para costear los gastos del hogar para sustentarse a ellos y a su hija, se salieron “un poco de presupuesto”, máxime porque el pago del servicio de energía eléctrica fluctúa. Esto no sucedería, indicó, con un sistema de energía solar.

“Con el incentivo, quedábamos dentro el presupuesto. Decidimos (solicitar el boleto) para poder aprovechar y no salirnos del ‘budget’. (De hecho), la razón número uno (es) poder tener un pago fijo”, comentó Martínez, quien contrató a WindMar Home para la instalación de los paneles solares.

Las mismas razones que impulsaron a Martínez también llevaron a Norma Canales Caraballo a solicitar el beneficio.

“En casa se va la luz todos los días, aunque tú no lo creas. Antes no se iba. Ahora se va todos los días…(y) sigue subiendo (la tarifa). Yo me quiero retirar, (pero) son más de $200 de luz (que tengo que pagar). Pues, ¿sabes qué? Llené el contrato (con WindMar Home) el domingo”, indicó Canales Caraballo, de 64 años quien vive con su hija y dos nietos en Santa Clara, en Guaynabo.

Además de que tendría una fuente de energía limpia y confiable, Canales Caraballo también resaltó el gran beneficio de los paneles solares a su propia salud, pues cuando se va el servicio de energía eléctrica en su casa, el uso de una planta eléctrica le afecta su asma.

“Yo estoy mayor. ¡Ya yo no estoy pa’ coger calores!”, recalcó.

El Programa de Incentivo Solar es sufragado de $100 millones de fondos de la Subvención en Bloque para el Desarrollo Comunitario de Mitigación (CDBG-MIT, en inglés). Con estos fondos, ciudadanos de clase media que vivan solos y devenguen ingresos hasta $84,400 y familias de hasta ocho miembros que devenguen hasta $158,400 podrán solicitar la asistencia económica para la instalación de un sistema energía solar de hasta $15,000.

Las solicitudes se evaluarán para determinar elegibilidad, los cuales incluyen: que la vivienda del beneficiario sea unifamiliar (no se permiten apartamentos); que la propiedad sea la residencia principal del solicitante (no se aceptan propiedades alquiladas); y que el solicitante sea ciudadano estadounidense, nacional no ciudadano, o extranjero cualificado.

Además, la persona deberá tener un acuerdo o contrato de instalación junto a un formulario de reconocimiento y consentimiento ambiental y no puede haberse comenzado la instalación del sistema al momento de solicitar el incentivo.

“Aunque no me den el ‘voucher’, ya yo hice el contrato con ellos”, aseguró Canales Caraballo, quien contrató a WindMar Home.

Otra solicitante, cuyo nombre prefirió mantener en el anonimato, celebró que esta ayuda se le haya otorgado a la gente de clase media.

“La clase media, prácticamente, nunca tenemos ningún tipo de incentivo u oportunidad”, subrayó. “El poder recibir algún alivio, sobre todo en lo que son los sistemas solares, motivan a cualquiera”, agregó la trujillana quien vive con su esposo e hija y mantiene dos trabajos.

De los 6,000 boletos disponibles, hasta el mediodía del jueves, restaban unos 267 en las oficinas de Aguadilla, Arecibo, Caguas, Mayagüez, Orocovis, Vega Alta, Yabucoa, Ponce y Fajardo. Solo en San Juan ya se habían agotado los boletos, mientras que las oficinas de Orocovis y Yabucoa son las más que aún tienen disponibles.

“Sabíamos que se iban a ir rápido, pero, sin duda, no nos deja de sorprender la rapidez en la que se van los boletos”, celebró el secretario del Departamento de la Vivienda, William Rodríguez Rodríguez.

Las compañías de energía solar contratadas son de “libre elección” por los participantes, por lo que el Departamento dijo que “no entramos a qué compañías” contratan. Más aún, Rodríguez Rodríguez aseguró que las 79 empresas certificadas a nivel Isla han sido contratadas, aunque algunas más que otras.

Según especificó el titular a este diario, esta es la primera y única ronda de ayudas que se efectuará de este programa.

Le dan “A+” al proceso

Todos los participantes del programa que conversaron con este medio reiteraron la efectividad y rapidez con la que se les atendieron en la oficina en San Juan.

Anticipando una congestión en la fila y largas horas de espera, algunos llegaron a las 12:00 a.m. para ser los primeros en aplicar una vez abrieran las puertas a las 8:00 a.m.

No obstante, los cientos que acudieron al lugar fueron atendidos en menos de dos horas, según pudo constatar Primera Hora. Ya para las 10:00 a.m., todos los solicitantes fueron atendidos. A esa hora también ya se habían agotado los boletos.

“Esto ha sido, sinceramente, tremendo. Me sorprendió, porque el gobierno casi no (funciona bien). Este trabajo que hicieron aquí fue excelente”, comentó Rafael Rivera, residente de Cupey y quien contrató a Power Solar para la instalación en su casa, que comparte con su esposa e hijo.

“Yo le doy A+ al proceso. Yo no madrugué. Aquí hay gente que madrugó, pero yo, particularmente, llegué a las 6 de la mañana”, dijo la solicitante trujillana quien, también, contrató a WindMar Home.

“(Estoy) sumamente satisfecho”, afirmó el secretario. “(Ha sido) positivo desde el momento uno. El sistema ha funcionado espectacular”, añadió.