Los cuatro municipios que se encuentran bajo estado de emergencias por las fuertes lluvias registradas desde el pasado 19 de abril, Naranjito, Orocovis, Aguas Buenas y Corozal, se han afectado por derrumbes y socavones, principalmente.

Las mayores pérdidas las reportan Naranjito y Orocovis, cuyos estimados de daños promedian los $1.8 millones cada uno. Aguas Buenas reporta $300,000 en pérdidas y Corozal unos $200,000, según salió a relucir este viernes tras una conferencia de prensa realizada en el Negociado de Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (NMEAD).

A estos pueblos se les pudieran unir otros dos municipios que han comenzado el proceso para sumarse a la emergencia decretada mediante orden ejecutiva por la gobernadora Jenniffer González ante las fuertes lluvias que todavía hoy, viernes, amenazan con causar más estragos.

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De inmediato, el secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), general Arturo Garffer, no quiso dar a conocer cuáles son estos dos municipios. Se limitó a indicar que es uno de la zona norte y otro del área central.

El funcionario tampoco quiso exponer cuánto dinero tendrán disponible para atender las emergencias reportadas a causa del mal tiempo reportado desde el pasado 19 de abril. Insistió en que esperan los reportes, las pruebas y los estimados que tienen que entregarle los municipios.

Los datos salieron a relucir luego de que el funcionario y el comisionado del Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (NMEAD), Ángel Jiménez Colón, se reunieran con los alcaldes de Aguas Buenas, Karina Nieves Serrano, y de Naranjito, Orlando Ortiz, así como representantes de los municipios de Corozal y Orocovis, para discutir los pasos que deben seguir para obtener ayudas.

Garffer dejó claro que el dinero que se le otorgará a los municipios por la emergencia no es para ayudar a los ciudadanos afectados por las lluvias. Serán “para poder ayudar a los alcaldes a atacar todos los que son edificios, derrumbes, carreteras, obras compensatorias, ese tipo de andamiajes que conllevan una emergencia. Las otras agencias del gobierno, pues, se enfocarán en si es algo particular de un compueblano de unos municipios y su propiedad, pues se llevaría entonces con esa agencia específica”, dijo a preguntas de Primera Hora.

El general, cual si estas lluvias fuesen un combate, llamó a estas malas condiciones del tiempo como el “enemigo”.

“Los alcaldes han expresado sobre sus áreas de preocupación ahora mismo con lo que está pasando, pero quiero dejarles saber que el enemigo aquí es el clima y el enemigo tiene un voto en esto y nosotros lo que estamos haciendo es tratando de prevenir y mover los activos del Estado lo más rápido posible para ayudar a los alcaldes a atacar este problema”, precisó Garffer.

Municipios explican sus pérdidas

Los alcaldes aludieron a que la mayoría de los derrumbes registrados no están relacionados a construcciones. Mientras, señalaron que los socavones se han reportado a causa de tuberías antigua.

En el caso de Naranjito, el alcalde explicó que el daño mayor lo registra un “vado”, que es una especie de puente que se construye dentro del cuerpo de agua, para dar acceso a la comunidad. Señaló que este vado tuvo daños menores en el huracán María y en el huracán Fiona. Ahora, sin embargo, es que amenaza en colapsar y su reparación promedia $1 millón, según dijo.

El vado está localizado en la entrada de la comunidad Los López, sector Cedro Abajo. Le da acceso a 70 familias.

El otro daño mayor está relacionado al puente de la carretera PR-814. Le correspondería repararlo a la Autoridad de Carreteras y Transportación. Ortiz indicó que el reemplazo de un nuevo puente podría salir en $700,000.

Pero, lo más que preocupa al alcalde de Naranjito es un sovacón en la carretera PR-5, pues representa el acceso principal hacia su municipio desde Bayamón. Dijo que aquí se deben invertir $100,000.

“Es un proyecto que está activo. Eso sin duda alguna es preocupante porque, volvemos, estamos hablando que ese recoge dos quebradas que bajan de la montaña, del barrio Achillote, cada vez que bajan a estos niveles y se encuentra con el tributario, que es el río Guadiana. Sin duda alguna, nos va a crear un problema mayor y ese es el que sí se está atendiendo al día de hoy”, precisó el alcalde en la conferencia de prensa.

Para la prensa no estuvo disponible personal del municipio de Orocovis. El alcalde, Jesús E. Colón Berlingeri, no asistió, pues estaba atendiendo situaciones en su pueblo, pero envió a la reunión a un representante.

En entrevista telefónica con Primera Hora, el ejecutivo municipal señaló que son los derrumbes los que han impactado a su pueblo. Dijo que el barrio más afectado es Pellejas.

Comentó que la mayoría son “en sitios donde no hay construcciones ninguna y se ha caído todo y ha tapado la carretera”.

Indicó que estos derrumbes ya han sido limpiados, documentados y entregados en un informe al NMEAD para recibir la aportación gubernamental. Señaló que los trabajos relacionado a las lluvias han costado $1.8 millones.

“El problema es que el terreno está tan saturado y siguen bajando derrumbes. Lo que necesito en este momento es que deje de llover”, sostuvo Colón Berlingueri.

Mientras, la alcaldesa de Aguas Buenas informó que tiene tres socavones afectando a comunidades. Pero, lo más que le preocupa son dos comunidades en la que su entrada y salida están amenazadas. Se trata de una una vía estatal y la otra es municipal, que “entra por Jagüeyes y sale por Sonadora”, según explicó.

“De caerse los dos lugares, quedan totalmente incomunicados”, alertó.

La otra comunidad afectada es el barrio Mulitas Alvelo, sector Juan Asencio.

Por su parte, la representante de Corozal, Lizabell Albino, indicó que las pérdidas en su municipio están relacionadas a derrumbes. No precisó las comunidades afectadas.