Cambio de colores en paredes, mudanzas de muebles y hasta los propios legisladores cargando matas y otros artículos para remozar las oficinas era parte de lo que se apreciaba hoy en el Capitolio.

En las escalinatas del viejo edificio de mármol se removieron las denominadas vallas plásticas “chinitas” que impedían el acceso del público. Sin embargo, en el lugar, así como en el interior del Capitolio, se observa mucha presencia policíaca.

En el Senado, las oficinas legislativas ya fueron repartidas, mientras en la Cámara de Representantes todavía hay mudanzas en agenda, como es el caso de los representantes del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), José Bernardo Márquez Reyes y Mariana Nogales Molinelli, quienes comparten una oficina en lo que se les habilita otra en el Anexo, donde también fueron realojados muchos de los legisladores novoprogresistas, ahora en minoría. En el segundo piso, se reubicó el portavoz de la delegación del Partido Nuevo Progresista (PNP), Carlos “Johnny” Méndez, expresidente de la Cámara.

También en el Anexo del Senado fueron asignados algunos de los senadores de las minorías novoprogresista, del MVC y del Proyecto Dignidad.

El expresidente del Senado y ahora portavoz de la minoría novoprogresista en ese cuerpo legislativo, Thomas Rivera Schatz, pidió, por su parte, la oficina en el edificio Baltasar Corrada del Río en el Paseo Covadonga. Esta oficina Rivera Schatz la habilitó en el cuatrienio de 2008 a 2012 y en el argot capitolino se le bautizó como “El Bunker”.

“La oficina que solicitó se le concedió como expresidente”, dijo Ángel Raúl Matos, oficial de prensa del presidente senatorial, José Luis Dalmau Santiago.

Mudanzas en el Capitolio.
Mudanzas en el Capitolio. (Nydia Bauzá)

Todos los 27 senadores ya tienen sus oficinas. Algunas que pertenecen a comisiones todavía se están asignando.

Empleados de la Superintendencia del Capitolio y de las oficinas de mantenimiento y propiedad de Cámara y Senado echaban el resto para pintar y acondicionar varias de las oficinas legislativas.

“Los presidentes de los cuerpos asignan las oficinas. Como el proceso de transición fue tan inusual y ha tardado tanto se ha atrasado. Probablemente todavía se están asignando oficinas”, dijo el superintendente del Capitolio, César Hernández Alfonzo.

“Prácticamente todos los empleados de la Superintendencia están trabajando en lo que tenga que ver con acondicionamiento de oficinas, pintura, aires acondicionados cerrajería, entre otras labores”, indicó Hernández Alfonso.

Dijo, no obstante, que las mudanzas “per se las hacen las oficinas de propiedad de cada cuerpo” legislativo.

Sostuvo que en el distritito capitolino “hay una crisis en los sistemas de acondicionadores de aire” lo que atribuyó a la exposición al salitre, por la cercanía de los edificios al mar.

Primera Hora captó el momento en que el representante por el distrito 22 (Lares, Utuado, Adjuntas y Jayuya), Jorge Alfredo Rivera, cargaba una planta ornamental artificial para adornar su oficina en las llamadas Catacumbas, en el primer piso de la Cámara.

“Es una palma, pero yo no soy de la palma”, soltó Rivera, quien es uno de los legisladores populares que se estrena este cuatrienio en la Casa de las Leyes.

En las oficinas asignadas al senador y exsecretario del Departamento de Hacienda, Juan Zaragoza Gómez, en el primer piso, cerca de la Rotonda, una brigada pintaba de blanco algunas de las paredes en azul claro. El despacho era ocupado por la senadora de la Palma, Migdalia Padilla, quien presidía la comisión de Hacienda del Senado.