Decenas de dueños de hogares de ancianos -particularmente en el área metro y de Fajardo- se han reusado a participar de la iniciativa de cernimiento con pruebas de COVID-19 que realiza el Departamento de Salud, precisamente, en momentos en que se han detectado en este tipo de residencias al menos 22 brotes del virus durante el mes de octubre.

“Sabemos que nuestros adultos mayores están en riesgo de contraer el virus y muchos establecimientos han sido consistentes en hacer las pruebas, pero hemos tenido hogares que se han reusado a participar de la iniciativa para hacer las pruebas y recibir orientación. Es algo que nos preocupa muchísimo porque desconocemos el por qué no quieren este tipo de apoyo, particularmente, considerado lo difícil que en ocasiones es conseguir las pruebas”, dijo a Primera Hora Idania Rodríguez, epidemióloga a cargo de la iniciativa.

¿Cuántos dueños de hogares han rechazado la ayuda?, se le preguntó.

“Puedo decirte que son decenas de establecimientos alrededor de la isla, pero con un patrón marcado en el área metropolitana y Fajardo”, sostuvo.

Indicó que como estos hogares están licenciados por el Departamento de la Familia se le recomendó a la agencia que personal de la División de Licenciamiento visite los establecimientos y exigir evidencia a los dueños de que cumplen con el protocolo de hacer pruebas de forma privada.

“Exhortamos también a los familiares a que llamen a estos lugares en los que tienen a sus seres queridos y pregunten por el protocolo de salud y seguridad que están siguiendo, el plan de comunicación en caso de que surjan casos positivos al virus y pruebas que muestren cada cuánto tiempo están haciendo las pruebas a los residentes. Es saludable que los familiares sepan las prácticas utilizadas para salvaguardar la salud de sus seres queridos”, dispuso.

Asimismo, manifestó que se establecerá comunicación con la asociación y federación de dueños de hogares de cuido prolongado para que se le entregue a los administradores de cada establecimiento una Guía de Cuidado diseñada en el Departamento de Salud en la que se brindan herramientas y consejos útiles para prevenir contagios y manejar la situación en aquellas instancias en las que se identifica un caso positivo.

“Esperamos que los establecimientos que no han querido participar del proceso de velar por la salud de sus residentes puedan tener este documento de base y referencia en el manejo diario que tienen con esta población”, expresó sobre el documento que podrá descargarse desde el portal de Salud.

Juanita Aponte, portavoz de la Asociación de Cuidos de Ancianos, reconoció que la situación ocurre en algunas residencias y dijo que muchas veces los administradores rechazan el cernimiento por recomendación de los médicos primarios “que no creen en los muestreos de pruebas preventivas”.

“Hay muchos médicos primarios que orientan en esa dirección. También algunos tienen temor de hacer pruebas porque piensan que si alguien arroja positivo los empleados no van a querer trabajar y se quedarán solos con la responsabilidad de cuidar a toda la matrícula... y creo que es un error. Todo lo contrario, deben ver los cernimientos como una oportunidad para prevenir situaciones de emergencia y poder frenar cualquier propagación del virus con una intervención temprana”, expuso Aponte.

Dijo que en su caso, tomó la decisión de realizar pruebas a empleados y residentes cada 15 días. “Tengo un laboratorio privado que viene a la institución porque no puedo pretender que Salud venga cada dos semanas... y como yo hay montones. Es un asunto de monitorear, detectar casos asintomáticos y actuar rápido antes que la situación se complique y ponga en riesgo a residentes que tienen su salud comprometida”, expresó.

Asimismo, vio con buenos ojos la guía de Salud y dijo que es una manera de uniformar los protocolos de salud y seguridad en todas las instituciones.

“La educación es importante y todos los días surgen cosas nuevas con este virus... yo por mi parte, ya hacía algo que ellos sugieren en la guía y que es bien importante: tomar la temperatura y oxigenación diariamente a todos los residentes como protocolo de cernimiento. Sabemos que la fiebre y los problemas de las vías respiratorios podrían ser síntomas y ahí pudiéramos identificar un posible caso”, reiteró al hacer hincapié en la importancia de las limpiezas e higienización en los hogares.

La mayoría de los brotes son en área metro

De otra parte, el sistema de vigilancia y cernimiento en hogares de cuido prolongado ha identificado 22 brotes de coronavirus en este tipo de residencias en lo que va de octubre.

Se informó que 17 de los 22 brotes -término científico establecido cuando se identifican más de tres contagios en un mismo entorno- han ocurrido en hogares de ancianos de la región metropolitana. Mientras, se registraron tres en el área de Caguas, y un brote en las zonas de Bayamón y Ponce.

En agosto también ocurrieron 22 brotes en hogares de cuido prolongado, una cifra que disminuyó a nueve durante el mes de septiembre.

De otra parte, Rodríguez explicó que hasta el 25 de octubre se habían registrado 73 muertes de residentes de hogares de ancianos. Los decesos se comenzaron a percibir desde abril -un mes después que comenzó la pandemia. Fue en agosto, con 30 casos, que se identificó el mayor número de muertes entre residentes de cuidos de adultos mayores. En septiembre murieron 21 y en lo que va de octubre han fallecido 11 personas.

“La edad promedio de las personas que han fallecido en estos centros de cuido prolongado es 83 años. En términos de género, la edad promedio de las mujeres es 87 años y la de los hombres 79 años”, explicó.

En total 36 mujeres y 37 hombres han fallecido a causa del coronavirus.

Las regiones con mayor casos de muertes han sido Bayamón con 27, seguido por el área metropolitana con 18 y Arecibo con 13. En la zona de Mayagüez han fallecido ocho envejecientes, y se ha dicho públicamente que seis de estos residían en el mismo hogar. Salud nunca ha revelado el nombre de establecimiento. Mientras, la región de Ponce registra cuatro muertes y las zonas de Caguas, Aguadilla y Fajardo tienen en el reporte un fallecimiento.

Desde que el Departamento de Salud asumió desde finales de julio el rol de liderar las pruebas de COVID-19 en los hogares de ancianos -una gestión que inicialmente se coordinaba con la Guardia Nacional y los Centros 330- se han impactado 391 residencias y 94 égidas, ubicadas en 50 municipios.

Al momento, se han realizado a través de las acciones directas que realiza Salud unas 13,794 pruebas serológicas, de las cuales 3,560 fueron a empleados y 10,234 a residentes. “De estos resultaron 107 positivas en empleados y 304 en residentes”, acotó Rodríguez.

En términos de pruebas moleculares, se han realizado durante los pasados tres meses 4927, de las cuales 2,033 fueron a empleados y 2,894 a residentes. “De estas, 71 empleados y 140 residentes arrojaron positivo al virus”, especificó la epidemióloga.

En términos generales, desde abril hasta el pasado domingo se han realizado 25,060 pruebas serológicas y 13, 710 pruebas moleculares. Durante los pasados siete meses se han impactado 686 hogares y égidas únicos de los 850 centros de cuido prolongado licenciados por el Departamento de la Familia que hay en la isla. Se estima que en el total de hogares residen entre 25,000 a 30,000 envejecientes. Los hogares impactados están ubicados en 70 municipios.

“Los municipios más impactados son San Juan, Bayamón y Caguas”, dijo Rodríguez sobre la labor del proyecto que cuenta con una plantilla de 120 empleados, incluyendo seis médicos.

El reporte del lunes del Departamento de Salud indica que hay 32,198 casos confirmados de COVID-19 y 30,937 probables. El número de muertes se eleva a 804. Mientras, se indicó que hay 356 personas hospitalizadas y de estas 55 están en cuidados intensivos y 44 (incluyendo un menor de edad) permanecen conectados a un ventilador.