La lección magistral que, a juicio de líderes sindicales y religiosos, han dado los estudiantes universitarios en huelga merece un apoyo masivo que se debe demostrar hoy a través de un paro nacional.

La Coalición Todo Puerto Rico por Puerto Rico aceptó el pedido a gritos de un paro nacional que hizo el movimiento estudiantil y convocó para hoy la paralización de los trabajos en agencias gubernamentales.

“Es un paro convocado por los estudiantes, en apoyo a los estudiantes, pero también en contra de las políticas del gobernador Luis Fortuño”, indicó Adriana Alonso, una de las portavoces de la Coalición.

El obispo Juan Vera, también miembro de la Coalición, explicó que la exhortación es para que los empleados públicos no entren a sus sitios de trabajo, sino que vayan a piquetear.

“La idea es que vayan y paren el centro de trabajo. Igualmente exhortamos a los trabajadores de la empresa privada a que, como hicieron el 15 de octubre, esta vez también estén en solidaridad con los estudiantes de la Universidad”, manifestó el líder religioso.

Al tiempo que recalcó que no es una actividad de naturaleza política, señaló que todo aquel que quiera participar está convocado.

“Todo el que desee participar puede hacerlo. No es una actividad de naturaleza política, pero todos los sectores del país se han afectado por las decisiones que toma el Gobierno. En un momento fue el Colegio de Abogados, los servidores públicos, las mujeres, las comunidades más pobres y hoy es la Universidad. Las decisiones afectan a los más diversos sectores del país”, expuso Vera.

Para el religioso, los universitarios han dado una muestra de civismo y de cordura. “Se han trastocado los papeles. Es el Gobierno el que ha actuado de una manera insensata”, señaló y aseguró que lo que escucha en la calle es que hay un clima de desconcierto por la manera en que el Gobierno ha reaccionado a la huelga universitaria.

El presidente del Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores, Roberto Pagán, dijo que ha convocado a los más de 12 mil empleados no docentes que representa en el Departamento de Educación para que se den cita en los centros gubernamentales en diferentes puntos del país.

“Mañana (hoy) no hay trabajo ni clases”, afirmó Pagán. “En primer lugar, es en respaldo a la lucha de los compañeros universitarios y en protesta por la implementación de la Ley 7 que ha provocado ese recorte en la Universidad”, expuso el líder sindical.

Acerca de las expresiones del Gobernador de que los sindicatos son “grupos extraños” en la huelga universitaria, Pagán señaló que parece que el Gobierno no sabe que “la Universidad de Puerto Rico es nuestra universidad”.

“No se puede pretender desligar la lucha universitaria de todas las luchas que ha estado librando el pueblo de Puerto Rico por más de un año”, expresó. Las políticas que se pretende implantar en la Universidad responden, a juicio de Pagán, al mismo objetivo de destruir el servicio público.

La única manera en que el líder gremial cree que los sindicatos pueden afectar la huelga universitaria es positivamente.

“El paro no fue idea de los sindicatos. Si alguien ha demostrado una gran claridad en su estrategia, han sido los estudiantes”, sostuvo.

En cuanto a la gran cantidad de oficiales frente a los portones de la Universidad, que Fortuño justificó precisamente por los “grupos externos”, Pagán dijo que se dejara de excusas.

“Si ésa es la excusa, que explique cómo fue que antes de que se supiera del paro rodearon la Universidad. Ellos ya tenían rodeado el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico y no había ninguna convocatoria”, recordó.

Aunque no participará del paro de 24 horas, la Utier mantendrá sus campamentos de apoyo en cada recinto.

“Estamos atendiendo las solicitudes directas de ayuda de logística, en seguridad, en centro de acopio, conforme a las solicitudes de los estudiantes”, aclaró Ricardo Santos, quien mencionó que no quería que se usara el nombre de la Utier ni que se confundiera su solidaridad.

“No puedo pararme en una tribuna y gritar ¡paro general!, ¡paro general!, Hay que acordarlo y discutirlo”, señaló en obvia crítica a la manera en que se organizó la actividad de hoy.

En lo que sí coincidió con los otros líderes es en que los sindicatos no afectan de ninguna manera los acuerdos a los que puedan llegar los universitarios.

“Yo voy a estar todos los días cubriendo un turno de 12 horas y me voy cuando se acabe el conflicto. Éste es el comienzo de la huelga del pueblo. Las decisiones las tomarán los universitarios, pero nuestra presencia solidaria va a estar allí hasta que se resuelva el conflicto”, aseguró.

“Nos vamos a mover cuando los estudiantes nos digan 'Utier, gracias. Se resolvió el conflicto'. El comandante en jefe son los estudiantes . Cuando ellos nos digan 'se acabó el mambo', entonces nos vamos”, reiteró Santos, quien exhortó a que hagan llegar a la Utier cualquier provisión que quieran enviarles a los estudiantes en huelga.