Para el gobernador Pedro Pierluisi, la desafiliación del alcalde de San Sebastián, Javier Jiménez, del Partido Nuevo Progresista (PNP) no tendrá repercusiones más allá del impacto que se pueda percibir en el municipio donde el incumbente lleva 20 años.

Esta semana trascendió en El Nuevo Día que Jiménez abandonó las filas del PNP aludiendo a que esa colectividad ya no cumple con los postulados que le dieron vida en 1967 a través de la figura de Luis A. Ferré. Anteriormente, en marzo, el alcalde admitió que si se fueran a llevar a cabo las primarias para la gobernación por La Palma, no votaría ni por el gobernador ni la comisionada residente en Washington, Jenniffer González. Sus argumentos se sostienen, particularmente, porque no estuvo de acuerdo con las determinaciones de Pierluisi durante la emergencia provocada por la pandemia del COVID-19. Señaló, además, “silencio” por parte de González, vicepresidenta del colectivo.

“Bueno, yo tengo que respetar las decisiones de cada quien. Nuestro partido, nuestra administración, la administración del PNP en este cuatrienio ha estado enfocada en el progreso que quiere el pueblo de Puerto Rico, en la obra que quiere el pueblo de Puerto Rico, en la justicia social que le debemos al pueblo de Puerto Rico y en nuestra causa mayor que es la estadidad. Esas son nuestras prioridades. Aparentemente esas no son las prioridades del alcalde de de San Sebastián. Yo respeto que tiene prioridades diferentes y tiene el derecho, pues, de desafiliarse de la colectividad”, dijo Pierluisi.

Se le inquirió al Primer Ejecutivo opinar sobre las posibles secuelas de la acción de Jiménez sobre el partido y cuando ya se enfilan candidatos para las elecciones de 2024.

“En cuanto a impacto en el partido, realmente el único impacto que yo veo al momento es allí mismo en San Sebastián, y ya estamos tomando medidas para verificar que los que están en la estructura del partido en San Sebastián, continúan apoyando los postulados de nuestro partido. Es decir: progreso, seguridad, estadidad, igualdad y justicia social. Nosotros vamos a verificar que los que están en esa estructura están claros en cuanto a cuáles son sus prioridades. Ese es el único trabajo que tenemos por delante a nivel de partido, como resultado de la decisión del alcalde”, respondió el gobernador.

Con la desafiliación de Jiménez surgió la posibilidad de que este aspire a la gobernación en representación del Proyecto Dignidad (PD), una acción que el alcalde no ha negado ni confirmado.

Por su parte, el presidente de PD, César Vázquez, dijo que analizaría la oportunidad de descartar continuar presidiendo el partido y figurar como candidato a la gobernación, si fuera cierto que Jiménez ostenta la posibilidad de correr al cargo en las elecciones generales.

“Yo estaría en la posición de considerarlo”, dijo Vázquez en Radio Isla. “Tenemos las puertas abiertas para él”, acotó.