La senadora María de Lourdes Santiago Negrón, portavoz del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), presentó hoy una Resolución Conjunta para ordenarle al Departamento de Educación tomar acción ante las temperaturas registradas en los salones de clase, que han llegado a exceder los 100 grados Fahrenheit. La resolución surge a raíz de las recientes manifestaciones por estudiantes y docentes en planteles escolares que carecen del acondicionamiento climático para salvaguardar la salud, el bienestar y el aprovechamiento académico del estudiantado y el magisterio ante la crisis climática.

La Resolución Conjunta radicada por la senadora Santiago Negrón, insta al Departamento de Educación de Puerto Rico a documentar las temperaturas promedio y máximas de los salones de clase; llevar a cabo estudios para adaptar la infraestructura de forma tal que se puedan operar acondicionadores de aire y ventiladores de techo; identificar cómo extender la aplicación de técnicas bioclimáticas; analizar alternativas para refrescar las áreas comunes exteriores y presentar propuestas para alcanzar métricas térmicas recomendadas para espacios dedicados a la enseñanza y el aprendizaje.

En su turno inicial en la sesión legislativa de hoy, la portavoz del PIP expresó que: “Hoy, nuevamente, las estudiantes y los estudiantes de la Escuela Gilberto Concepción de Gracia en Carolina dejaron los salones y se tiraron a la calle para que el país escuche su reclamo, que es el reclamo de muchas escuelas, de muchas maestras, de muchos estudiantes. No están pidiendo ni tecnología supersofisticada ni ningún lujo para su escuela: lo que están pidiendo los estudiantes y las estudiantes es poder estudiar en temperaturas aptas para el ser humano”.

La Administración Federal de Seguridad Ocupacional y Salud (OSHA, por sus siglas en inglés) señala que en los espacios interiores deben mantenerse temperaturas que no excedan los 86 grados Fahrenheit para las personas adultas. Mientras tanto, el personal docente de distintas escuelas en todo el país ha comunicado que las temperaturas de sus aulas han llegado a exceder los 100 grados Fahrenheit.

“Esto no es un tema ligero, no es un tema liviano y no se va a poner mejor con la crisis climática”, acotó la senadora Santiago Negrón. “Esta crisis térmica que impide que los salones sean habitables para nuestras niñas, para nuestras maestras, no puede ser la oportunidad fácil para el contrato de emergencia de amigos del alma. Tiene que provocar un análisis sensato, honesto, de las condiciones que el Estado provee para que nuestra infancia y nuestra juventud aprenda; y de lo complicado de las consecuencias de la crisis climática”.

La aprobación de esta Resolución Conjunta procurará que el Departamento de Educación produzca, dentro de un término de un año, un informe sobre el estado térmico en las escuelas públicas.