YAUCO. Para el gobernador Ricardo Rosselló, la idea de que el País pueda salir de la quiebra el año próximo, está solamente en la mente de la directora ejecutiva de la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), Natalie Jaresko.

Destacó que culminar el proceso de Título III sin contar con los acuerdos básicos hará que algunos tenedores de Obligaciones Generales (GO’s) del gobierno central establezcan litigios que tardarían años en resolverse. 

“Cuando ella dice la quiebra, se refiere al proceso de Título III. En su mente, ella dice que todos estos acuerdos se van a ratificar, pero de momento estamos en una posición diferente. Se acaba el proceso de Título III con los acuerdos para proceder con esos acuerdos, se tiene que tener partners en este proceso, el gobierno de Puerto Rico es un partner de ese proceso. Nosotros estamos diciendo desde hoy que no vamos a entrar en ningún acuerdo cuando se siga incluyendo las reducciones en las pensiones”, reiteró Rosselló.

El mandatario explicó que solamente el 10% de los bonistas ha llegado a un acuerdo y Jaresko lo proyecta “como si todo el mundo llegó a ese acuerdo y no lo es”.

“Lo que implica eso es que el resto del 90% va a hacer una de dos cosas: o se queda en el acuerdo o se ponen a litigar y las experiencias que se han dado en estos litigios es que esto es mucho más extensivo que unos meses y que unos años inclusive”, comentó ayer en una rueda de prensa en Yauco, donde se anunció la expansión de las operaciones de la empresa alemana Sartorius con una inversión de $130 millones, así como la creación de unos 300 empleos y la retención de otros 595 puestos de trabajo.

Insistió en que las propias acciones adoptadas por la JSF imposibilitan que estos acuerdos se materialicen, y destacó que no llegará a algún consentimiento que implique una reducción en los ingresos de los pensionados. 

“Están dirigiendo a Puerto Rico en una trayectoria puramente material, en vez de una de desarrollo económico. Aunque la intención sea terminar o vincular alguno de estos acuerdos, lo que van a propiciar es un litigio largo donde su premisa de que va a terminar la quiebra sería incorrecta”, estimó.

Rosselló opinó que no importa la decisión que adopte el Tribunal Supremo de los Estados Unidos en cuanto a la constitucionalidad de los nombramientos de la JSF, la discusión que se genere sobre el tema será beneficiosa para Puerto Rico. 

De hecho, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, envió ayer al Senado los nombramientos de todos los integrantes de la JSF.

“Es importante la decisión que sea porque nos da estabilidad de cara hacia el futuro. Malo era la incertidumbre no saber qué va a pasar el 15 de julio, que era cuando caducaba en efecto, si no se había tomado la determinación de esta Junta, pero todavía se quedaba el andamiaje de estatuto, de jurisprudencia, de Promesa de que creaba una serie de elementos de incertidumbre. Todo lo que pueda aclarar yo creo que es positivo para Puerto Rico”, planteó.

Rosselló espera que, en el Senado federal, a los renominados les pregunten ¿por qué proyectaron que Puerto Rico iba a tener unos recaudos que terminaron siendo $3,000 millones más de lo que proyectaron, por qué ustedes proyectaron una economía de negativo 11% cuando la variante fue de 8% mayor”.

Además, confirmó que envió una resolución a la Legislatura para restituir $1,400 millones para el Sistema de Retiro del Gobierno.