Por segunda ocasión consecutiva la vacuna fabricada por Johnson & Johnson contra el COVID-19 fue retirada voluntariamente, en esta ocasión, mientras se investiga una posible contaminación del producto.

En un aparte con varios medios de comunicación, el secretario de Salud, doctor Carlos Mellado, informó esta mañana que se trata de una situación que ocurrió a nivel nacional, pero que como medida cautelar el producto fue retirado mientras se investiga el evento.

Advirtió que la doctora Iris Cardona, principal oficial médico de Salud, le anticipó que entiende que ninguno de los lotes contaminados llegaron a Puerto Rico, pero aún así se optó por el retiro voluntario del producto mientras se aclara esta situación.

“El que se puso la vacuna no tiene absolutamente ningún riesgo de nada”, aseguró Mellado, quien insistió en que la vacuna Janssen, en general, es segura y efectiva.

Según el funcionario, fue ayer cuando la agencia se enteró que la compañía Johnson & Johnson estaba retirando unos lotes por posible contaminación. Comentó que Salud se enteró a través de la prensa y se comunicaron con la compañía y optaron por el retiro voluntario de este producto.

Mellado explicó que la contaminación de un producto biológico como una vacuna ocurre cuando se impacta el proceso de calidad y manejo de la vacuna, por ejemplo, cambios de temperatura, que haya sido afectada por la luz del sol o dilemas en su transporte, entre otros factores.

El médico comentó que se espera que esta tarde se identifiquen los lotes afectados y si llegaron o no a Puerto Rico, aunque anticipó que se presume que no porque se trata de lotes de reciente envío.

“Sí, tenemos temor de que la gente puede tener miedo de utilizarla (la vacuna de Johnson & Johnson)”, dijo al reconocer que es la segunda ocasión que ocurre un evento con esta vacuna.

Sobre la primera situación, comentó que se encontró que .0006% de las personas vacunadas con Janssen pueden desarrollar trombosis venosa, aunque advirtió que 14.5% de los pacientes de COVID-19 desarrollaron coágulos.

En cuanto a la iniciativa que empezaba hoy en el aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín de vacunar a pasajeros residentes en el país con esta vacuna, si es que no están vacunados e interesan hacerlo, indicó que este operativo se suspendió pero se espera retomar la próxima semana.

El secretario reconoció, mientras tanto, que después de una vacunación 20% de las personas se pueden complicar y aproximadamente 1% puede morir. Sin embargo, resaltó que en un balance de beneficios y riesgos, pesa más la protección que ofrecen las vacunas contra el COVID-19.

“El proceso de vacunación es lo que nos va a sacar a todos de esta pandemia”, concluyó.