Tal y como adelantaran en el día de ayer, el Consejo General de Estudiantes del Recinto de Ciencias Médicas(RCM) de la Universidad de Puerto Rico llegó a varios acuerdos durante una asamblea extraordinaria en la tarde del jueves, entre los que se confirmó la celebración de una manifestación mañana, en repudio del nombramiento de la Doctora Ilka Ríos como rectora del recinto.

Primera Hora supo que el piquete estudiantil se celebrará a las 3:00 p.m. frente al anfiteatro Jaime Benítez de ese recinto.

Durante la reunión que fue convocada para las 4:30 p.m. y que culminó antes de las 7:00 p.m., los estudiantes también acordaron la celebración de una segunda manifestación el miércoles de no haberse producido la salida de Ríos del puesto. Además, de prolongarse la situación, se convocaría otra asamblea extraordinaria el viernes 15 de septiembre. Tras la asamblea, Primera Hora intentó comunicarse con la presidenta del Consejo General de Estudiantes, Glizette Arroyo, para conocer los pormenores del cónclave, pero ésta no estuvo disponible. También se hicieron intentos para contactar a la presidenta interina del Consejo General de la Escuela de Medicina, Valeria Toro, pero ninguna de las dos estudiantes contestó las múltiples llamadas ni mensajes de texto enviados.

Ríos, quien asumió la rectoría en propiedad el 1 de septiembre, se ha aferrado al puesto y aseguró públicamente que no renunciará al mismo. La funcionaria fue destituida el año pasado por el propio presidente de la UPR, Luis A. Ferrao -quien recomendó su designación aún cuando no fue favorecida en el proceso de consulta- a pesar que se le señaló por irregularidades administrativas y por supuestamente intervenir indebidamente en una decisión de la facultad de la Escuela de Medicina. Específicamente, se le señaló por haber ordenado la alteración de calificaciones de una estudiante de la Escuela de Medicina que había fracasado tres cursos medulares durante su segundo año de estudios. En lugar de Ríos, estuvo como rector interino Carlos Ortiz Reyes.

El nombramiento de Ríos ha generado más de 17 renuncias, en momentos en que el RCM sufre algunos reveses que incluyen, por ejemplo, que la Middle States Comission on Higher Education (CSHE) ha señalado en múltiples ocasiones al recinto por su inestabilidad en la gobernanza universitaria, lo cual podría conllevar a que se le retire la acreditación general, perdiendo así su elegibilidad a recibir fondos federales. Las reducciones presupuestarias han abonado también a los problemas.

La debacle también incluye que el Liaison Committee on Medical Education (LCME) está pautado para reevaluar la acreditación de la Escuela de Medicina, comenzando el 2025; un proceso que se ve amenazado por la renuncia del doctor Hilton Franqui, quien dirigió el proceso exitosamente, según estipuló el exrector públicamente.

Ante lo acontecido el pasado 31 de agosto, la directiva de transición del Consejo de Estudiantes de la Escuela de Medicina del RCM se reunió de forma extraordinaria, y por unanimidad emitieron una resolución en la que se repudia “enérgicamente” el nombramiento de Ríos y exigen su “separación inmediata” del puesto.