Tras la renuncia ayer del ahora exrepresentante José Luis Rivera Guerra, ya el Partido Nuevo Progresista (PNP) pronostica que para finales de octubre tendrán al sustituto del legislador saliente.

Así lo expresó el secretario general del PNP, Rafael “June” Rivera Ortega, quien se mostró sorprendido tras la salida del representante por el distrito 17 que compone los municipios de Moca y Aguadilla.

“No me lo esperaba. Él fue un buen legislador, bien fogoso. Mencionar Aguadilla o Moca, era mencionarlo a él. Solo puedo decir cosas buenas”, indicó.

Tras Rivera Guerra indicar en su carta que su renuncia era “inmediata e irrevocable” no tendrá los 15 días de reconsideración, según las enmiendas realizadas al código político de El Capitolio.

Para que comience formalmente el proceso, primero se le deberá anunciar al cuerpo legislativo –que inicia sesión ordinaria el 20 de agosto– y luego a Rivera Ortega, a partir de que eso ocurra el PNP tendrá 60 días para llenar la vacante.

El secretario del partido prevé que entre el 15 y 30 de octubre se celebrarían los comicios especiales.

“Yo voy a recomendar, como he hecho en los tres anteriores casos, que sea una elección de delegados”, sostuvo.

En lo que va de cuatrienio el PNP ha sufrido cuatro bajas en su delegación legislativa: Ricardo Llerandi, Ramón Rodríguez Ruiz, Samuel Pagán y, ahora, Rivera Guerra.

A la recomendación del secretario general se le unió la comisionada electoral del PNP, Norma Burgos: “Recomendaré lo mismo que hemos hecho anteriormente”.

Sin embargo, el senador del distrito IV, Luis Daniel Muñiz, que comprende los pueblo que Rivera Guerra representaba, adelantó estar en contra de este método.  

“No soy creyente que unos cuantos elijan, ni lo que hace el Partido Popular Democrático de nombrar democráticamente, la primaria debe ser de todo un pueblo progresista”, dijo a Primera Hora mientras negaba conocer de alguna persona interesa en el puesto vacante.

Burgos, adelantó que será “un proceso fácil”, que, de llevarse a cabo como las anteriores, participarían unas 30 unidades electorales, con unos 100 delegados.

Asimismo, aseguró que “no incurrirán en gasto público”, pues “utilizaremos las resmas de papel que tengo y lo imprimiremos en blanco y negro”.

Burgos reveló que nombrará como delegado presidencial de los comicios a Alberto Fradera Vázquez.

Tanto la comisionada electoral del PNP como el secretario general del partido coincidieron en que la elección deberá ser un domingo entre las 9:00 a.m. y 2:00 p.m.

Será bien recordado

El senador Muñiz dijo saber del “sacrificio y el trabajo” realizado por Rivera Guerra por su distrito.

El legislador recordó los momentos difíciles en los que trabajó junto al político renunciante como: el cierre de gobierno durante la gobernación de Aníbal Acevedo Vilá, la Ley 7 de Luis Fortuño y la imposición de la Junta de Supervisión Fiscal por parte del Congreso de Estados Unidos.

“Todos tienen su estilo y su manera de trabajar por la gente, pero él me ha expresado su interés de ayudar a la ciudadanía en el cobro excesivo de peajes de AutoExpreso y de restaurar los semáforos”, indicó.

Al igual que Rivera Ortega, Muñiz aseguró que las cuatro bajas del PNP “no afectan para nada la institución que somos”.

El presidente de la Cámara de Representantes, Carlos Méndez Núñez, indicó por su parte y en declaraciones escritas que le aceptó la renuncia a Rivera Guerra “no sin antes expresarle mi agradecimiento por el trabajo que realizó a favor de los constituyentes”.

“Desde que juramentó en enero 2017, Rivera Guerra laboró sin descansar, radicando legislación para, entre otras cosas, mejorar la seguridad en nuestras carreteras, hacer transparente los procesos en el sistema de AutoExpreso y para proveer ayuda directa a sus constituyentes tras el paso de huracán María. Estas y otras muchas aportaciones serán parte de su gran legado como Representante”, dijo.

Cobros “injustos e ilegales”

Rivera Guerra se va en medio de especulaciones de que el gobernador Ricardo Rosselló vetará su proyecto de ley que buscaba establecer multas fijas en los peajes de AutoExpreso.

“Aunque el gobernador vete el Proyecto del Senado 642, la realidad es que administrativamente se puede atender. La frustración es inherente al trabajo político”, señaló en la conferencia de prensa de su renuncia.

“Aquí el problema con AutoExpreso es que, al no tener una lectura a tiempo real, están induciendo a los ciudadanos a que comentan faltas. Y de esas multas, yo vuelvo y digo, son injustas y son ilegales. Así que no hace falta un proyecto de ley para que el gobernador atienda eso. El gobernador me dio su palabra, así que yo estoy seguro que, aunque vete el proyecto, buscará el mecanismo y estoy disponible para ayudarlo”, adelantó.

Se va para no volver

Tranquilo, pero entre lágrimas, el ahora exrepresentante del PNP anunció ayer su renuncia, para desempeñarse como maestro de ciencias en el Liceo Aguadillano, donde estudia uno de sus tres hijos.

“Muchas veces los políticos se van cuando están en mala o cuando los botan, pero yo me voy bien, me voy tranquilo, es mi mejor momento… Gracias a Dios este es el mejor momento para poder irme con la frente en alto y poder hacer otras tareas”, pronunció desde El Capitolio rodeado de su familia.

Según la carta enviada al presidente de la Cámara de Representantes, Carlos ‘Johnny’ Méndez Núñez, la renuncia es de “manera inmediata e irrevocable” con fecha de efectividad del 31 de julio.

“Con esta renuncia como representante, también anuncio que no estaré aspirando a ningún puesto político en el año 2020, no representante, no senador, no alcaldía. Esto es un adiós a puestos electivos, podré ayudar, pero nada electivo”, resaltó.

Y es que, de acuerdo con el exlegislador, el contrato como maestro, donde ofrecerá tres clases con sus respectivos laboratorios, le prohíbe hacer expresiones y participaciones políticas.

Rivera Guerra – de 44 años y quien comenzó en el servicio público a los 25– expresó que “no pensaba estar en la política tantos años”.

Un legado lleno de escándalos

El escaño que ocupó desde el 2000, y que cuenta con una anterior renuncia por imputaciones éticas, estuvo llena de escándalos.

“Las controversias, si las sumamos, representan 10 minutos versus 14 años que yo he estado sirviendo, así que los beneficios para los ciudadanos han sido muchos no solo a nivel de Puerto Rico sino para los que me eligieron, que son Aguadilla y Moca, esos me conocen de tú a tú”, expresó Rivera Guerra.

La controversia más reciente fue el caso de agresión –que fue archivado el pasado 8 de enero– entre él y el líder sindical Julio Vargas Cruz por el codazo ocurrido el 27 de abril del año pasado durante una manifestación.

Además, en 2007, fue detenido por la Policía por chocar un vehículo y huir de la escena. Y en 2011, fue acusado por la Autoridad de Energía Eléctrica y la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados de hurto de servicios.

En 2012, fue señalado por no divulgar la liquidación de una deuda al construir una piscina en su residencia, ni informó las mejoras de más de $3,000 que le realizó a su hogar. Ese mismo año, el Panel sobre Fiscal Especial Independiente le radicó tres cargos por violación a las leyes de Ética y Permisos.

Un año después, se declaró culpable de residir en una vivienda que no poseía permisos de uso y no informarle a la Oficina de Ética Gubernamental de la construcción de la piscina. A tales efectos, fue sentenciado a cumplir servicio comunitario y pagar multa de $2,900.

A preguntas de cómo les explicará estas situaciones a sus nuevos estudiantes de nivel superior, Rivera Guerra indicó que estas faltas al orden social “no inciden en su capacidad de ser maestro”.

“Políticamente, el pueblo adjudicó todas esas controversias. Todas se atendieron responsablemente. Me decía un profesor, catedrático en el Colegio de Mayagüez [donde estudió], que yo era mejor maestro que político”, pronunció con la voz entrecortada.

“No es lo que pintan los medios”

Ante el desglose de los escándalos por parte de la prensa, su esposa, Yanira Ruiz, saltó para destacar la labor de su compañero de vida hace más de 30 años.

“Es una persona excelente, que no es lo que pintan muchas veces los medios, es un padre ejemplar, es un esposo excelente”, indicó Ruiz.

Sin nadie preguntar, su esposa trajo a colación la baja salarial que experimentará su familia.

“Ustedes se estarán preguntando ‘¿cómo él va a dejar ese salario y los beneficios?’. Él lo está dejando sin pensar en el aspecto económico porque para nosotros, como familia, eso no es lo más importante. Es brindarles a nuestros hijos una estabilidad, unión familiar, que tengan las herramientas de estudios, y para nosotros eso es lo más importante”, enumeró.

La esposa de Rivera Guerra resaltó que estuvieron todos presentes durante el anuncio de su renuncia “porque esa decisión la tomamos en familia y no fue fácil”.

Asimismo, aprovechó el momento para hacerle una petición especial a la prensa.

“Yo le voy a pedir a ustedes encarecidamente que las especulaciones no dañan tan solo a él como persona, afectan a la familia en general”, requirió.

Rivera Guerra dijo que algunos miembros de su cuerpo de trabajo mantendrán sus puestos hasta que llegue el próximo representante.