Con la preocupación de que una disminución en las pensiones de los empleados públicos provoque una crisis humanitaria en el País, el presidente de la Asociación de Pensionados del Gobierno de Puerto Rico, Roberto Aquino, sigue de cerca la situación en los Sistemas de Retiro.

A juicio de  Aquino,  unos 35,000 jubilados aquí reciben actualmente sólo una pensión básica de $500 al mes.

Con esa cifra, “comen o no se medican, o se medican y dejan de comer”, ilustró sobre el panorama sombrío que vive ese sector.

La situación económica de los pensionados del Gobierno podría empeorar con las determinaciones que se tomen para enfrentar los augurios de insolvencia en los Sistemas de Retiro del Gobierno y de Maestros y con aquellas medidas que sean implementadas por la Junta de Supervisión Fiscal (JSF).

“La Junta no ha establecido claramente qué es lo que va a hacer… Pero vienen a hacer unos ajustes a todo lo que sea presupuestado. Mi preocupación mayor es cuánto podría ajustarse a las pensiones y si la disminución es tal que se cree una crisis humanitaria”, señaló Aquino.

El déficit en los sistemas de Retiro no sólo plantea un reto económico para los pensionados, sino también uno emocional, lo que debe ser mirado y atendido con cautela, según Aquíno.

“Esto afecta todo en su vida diaria”, alertó el Presidente de la Asociación de Pensionados, una organización sin fines de lucro que agrupa a jubilados de los Sistemas de Retiro del Gobierno de Puerto Rico y la Judicatura, de Maestros, de la Universidad de Puerto Rico y de la Autoridad de Energía Eléctrica, entre otros.