Representantes de la Unión Independiente de Empleados de la Administración de Compensación por Accidentes de Automóviles (ACAA) reclamó este miércoles que la corporación rehaga el plan de retribución, ya que supuestamente la mayoría del presupuesto para ponerlo en vigor lo asignaron a 27 subdirectores y ayudantes que ocupan plazas clasificadas como “innecesarias”, mientras dejaron desprovisto de aumentos a los que menos ganan.

De inmediato, el director de la ACAA, Noé Marcano, dijo que “es lamentable que quieran desinformar a su propia matrícula y que le falten a la verdad”.

Alegó que la unión hizo un “cálculo erróneo” para confundir sobre el alcance de los aumentos salariales.

Según la denuncia realizada por la presidenta del gremio, Itza Santiago Toste, y el asesor legal de la unión, Leonardo Delgado Navarro, la Junta de Supervisión Fiscal le aprobó a la ACAA $1.6 millones para ejecutar dicho plan de retribución. Aluden a que, de esta partida, $1.2 millones se les asignó a las 27 plazas en controversia. Dijeron que, de los restantes $400,000 sobrantes, sólo 59 de los 222 unionados recibirán un aumento.

“No estamos en contra del aumento que le dieron a los unionados. Lo que pasa es que no corresponde a la realidad económica que merece. No le hace justicia ante el impacto del costo de vida por los últimos 10 años”, afirmó el abogado.

De hecho, los líderes de la unión enfatizaron que en la carta en la que la Junta aprobó el presupuesto para poner en vigor el plan y que está fechada el pasado 25 de marzo subraya el problema que denuncian. La misma expone que “surge una consideración notable: la necesidad de una escala salarial adicional para abordar de manera integral todas las clasificaciones de puestos dentro de las escalas salariales de nivel inferior”.

Para la presidenta de la Unión, esta expresión representó que “la propia Junta se impresionó de que no había una escala de aumento para los que menos salario recibían en la ACAA. Es decir, que el señor Noé Marcano se preocupó por darle mucho a su aparato de alta gerencia, pero se olvidó de los que cobran menos”.

A juicio de Santiago Toste, el plan de retribución “es desastrozo”.

Explicó que el actual alcalde de Cataño, Julio Alicea Vasallo, cuando era directo de la ACAA en el 2010, cerró los puestos de subdirectores de las divisiones o ayudantes del director. Denunció que estos puestos fueron nombrados nuevamente durante la administración del gobernador Pedro Pierluisi.

“Desde el 2010 quedó demostrado que no hace falta un subdirector por cada director. La cosa es peor. El salario de ese grupo de personas, todos nombrados bajo el gobierno de Pierluisi, va desde $70,862.42 a $87,628.27. Del $1.6 millones que aprobó la Junta para aumentos salariales, esos 21 empleados se llevan la media de $950,941.62. Es decir que de 233 empleados para los que Noé Marcano pidió aumento, estos 21 se llevan el 57%”.

Los otros empleados a los que señalan como del grupo de 27 personas a las que se le dio la mayoría del presupuesto del aumento salarial corresponde a seis plazas de ayudantes de directores. El salario asignado fue de $42,252.95, lo que representa $253,517.70 del presupuesto para dar aumentos.

“El 73% de lo que aprobó la Junta se lo chupan 27 clasificaciones que fueron cerradas por innecesarias en el 2010″, indicó la presidente del gremio.

Lo que Santiago Toste y Delgado Navarro describieron como justo era seguir una directriz que dio la Junta de Supervisión Fiscal el pasado 8 de agosto, en la que se debía analizar los salarios de la industria de seguros en el noreste de los Estados Unidos, establecer la media de estos y restarle un 20% para establecer cuánto aumento le correspondía a cada empleado de la ACAA. Alegaron que dicho paso no se realizó.

“¿Cuál es nuestro punto? Que desde el 2014 ningún trabajador en ACAA recibe aumentos, que el incremento en el costo de vida a impactado a todos por igual -se estima en un 29% a un 33% en los últimos 10 años- y que, a lo mínimo, siendo todos igualmente afectados, el incremento debía ser igualmente uniforme”, estableció la presidenta.

Para determinar el curso de acción que establecerán para combatir este plan de retribución, los unionados se reunirán en asamblea el sábado, 4 de mayo, en el Club de Leones de Caguas.

Reacciona el director

Ante las denuncias, el director de la ACAA afirmó que “el plan hace justicia y nuestro gobierno ha hecho justicia después de más de 10 años sin recibir un incentivo económico”.

Rechazó punto por puntos los argumentos esbozados por los representantes de la unión para repudiar tal convenio, el cual comenzará a entrar en vigor el próximo 18 de abril.

Marcano aludió a que no es correcto que sólo 59 unionados de la ACAA sean los que recibirán aumentos. Dijo que se trata de 134 unionados. A estos los que describió como choferes, mensajeros, conserjes, oficiales de reclamaciones, empleados de planta física, entre otros. Dijo que son “los que menos cobran”.

“De la cantidad de unionados, más del 50% se beneficia de un plan de clasificación aprobado por la Junta. Mi pregunta es a la unión, si verdaderamente ellos están defendiendo el interés de los unionados o está defendiendo el interés de algunos unionados, porque el número está ahí y no falla”, dijo.

Indicó que los otros 100 empleados unionados, aproximadamente, que no recibirán un alza en este plan de retribución se debe a que “están por encima de la escala salarial. Llevan muchos años recibiendo aumentos salariales y están por encima del mercado, según la métrica de la Junta de Supervisión Fiscal”.

Asimismo, el directo expuso que el grupo de beneficiados con el plan de retribución lo completan unos 57 empleados gerenciales.

Rechazó que hayan creados plazas nuevas de subdirectores y ayudantes. Dijo que lo que hizo fue llenar las vacantes que habían en estas plazas. No estableció si las mismas eran innecesarias o no, como plantearon los representantes del gremio.

Marcano también estableció que la Unión no puede establecer que en 27 empleados se van $1.2 millones del presupuesto para implementar el plan de retribución. Dijo que sumaron la totalidad del salario de manera incorrecta y no el monto específico de lo que se aumentó a estos subdirectores y ayudantes.

“La intención de la administración era darle $1,300 (mensuales) de aumento a cada empleado, lo cual la Junta no aprobó, luego de un sinnúmero de conversaciones, donde la Unión y su representación legal participaron, tanto en la ACAA, como en la Oficina de la Gobernación, que tenían conocimiento total y absoluto de lo que estamos discutiendo en beneficio a los empleados”, manifestó.

Marcano invitó a todo empleado que se sienta inconforme con el plan de retribución establecido a que realice una queja dentro de los 30 días que tienen para hacer la reclamación “con argumentos válidos”. La fecha limite es a mediados de mayo.