Por cuarta ocasión en más de siete décadas, la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier) decretó una huelga indefinida de todos sus miembros empleados por la Autoridad de Energía Eléctrica.

El presidente de la (Utier), Ángel Figueroa Jaramillo, anunció hoy el inicio del estado huelgario a nivel nacional tras "haber agotado todas las alternativas".

Durante varios días, la Utier ha estado en paro mientras denuncian que la administración de la AEE se ha negado a negociar las cláusulas económicas del nuevo convenio colectivo y asegura que la gerencia intenta reducir los derechos adquiridos en pasados convenios.

"Ante la realidad que a esta hora tenemos de frente, la Utier no ha tenido otra alternativa que decretar un estado huelgario a partir de este momento", sostuvo Figueroa Jaramillo. "Responsabilizamos a la alta gerencia de la AEE, a su director el ingeniero Josué Colón y al gobernador Luis Fortuño por cualquier evento que pueda suceder durante este proceso huelgario", indicó.

La última vez que la Utier decretó una huelga de toda su matrícula fue en 1981. Previamente, lo habían hecho en 1973 y luego por varios meses entre 1977 y 1978. En el 2000, únicamente los celadores de línea también se fueron a la huelga, según Figueroa Jaramillo.

La Utier cuenta con aproximadamente 4,600 miembros, que incluyen celadores de línea, empleados de oficinas, plantas, podadores y otros trabajadores que se encargan del mantenimiento de las líneas que usa la AEE para llevar la energía eléctrica a sus abonados.

De acuerdo con Figueroa Jaramillo, los miembros de la Utier no realizarán ningún acto intencional que afecte el servicio de los abonados. "Lo que estamos indicando es que las dificultades que ocurren todos los días en nuestro sistema eléctrico, ahora la responsabilidad recae sobre la alta gerencia de la Autoridad y el Gobierno de Puerto Rico", expresó Figueroa Jaramillo.

Asimismo, sostuvo que cuenta con el apoyo de los otros sindicatos de la AEE, que también se encuentran en proceso de negociación de sus convenios colectivos. Señaló que esos unionados, así como los gerenciales, se han comprometido a no intentar cruzar las líneas de piquete, que esperaban tener a partir de hoy en instalaciones de "plantas, técnicas y sistemas de riego".

En horas de la mañana, el presidente de la Unión de Empleados Profesionales Independientes (Uepi), Evans Castro, dijo que convocó a la matrícula para una asamblea extraordinaria el sábado, cuando se discutiría la posibilidad de un voto de huelga, tras dos años de negociación del convenio con la AEE.

También se encuentran en negociación de sus convenios la Unión Insular de Trabajadores Industriales y Construcciones (Uitice), la Unión de Pilotos de la AEE (Upaee).

La Utier comenzó el proceso de protestas en la calle el pasado lunes, cuando unionados se ubicaron en las entradas de las oficinas centrales de la AEE en Santurce, aunque la administración ha movido personal en helicópteros, pues el edificio cuenta con un helipuerto. Hoy, los unionados también amanecieron en las entradas del Centro de Transmisión de la AEE en Monacillos.

Cerca del mediodía, al anunciar el decreto de huelga, Figueroa Jaramillo dijo que todos sus miembros ya debían tener "campamentos permanentes" establecidos en sus centros de trabajo en toda la Isla. Añadió que la duración dependerá del desarrollo de las negociaciones, por lo que se determinara "día a día".

Se esperaba que las partes se volvieran a reunir a partir de las 2:00 de la tarde de hoy. El lunes y el martes se habían reunido por varias horas. El convenio expiró en agosto pasado, pero llevan negociando por cerca de 10 meses. El sindicato esperaba que el decreto de huelga no interrumpiera celebración de las reuniones de negociación.

"El que los trabajadores ejerzan su derecho constitucional a una huelga no limita ni impide la continuidad de la negociación. En múltiples ocasiones ha ocurrido", mantuvo Figueroa Jaramillo. "Si ellos se levantan de la mesa, tendrán que explicarle al país por qué se están levantando", añadió.

La administración sostiene que no cuenta con los recursos para el aumento salarial que ha solicitado la Utier, al considerar que le costaría sobre $300 millones a la AEE, que entonces tendría que aumentar la factura a sus abonados. También asegura que tiene un déficit de cientos de millones de dólares.

Por su parte, Figueroa Jaramillo dijo que la AEE tiene un superávit de sobre $700 millones y señaló que en la mesa de negociación el director de finanzas de la AEE, Nelson Morales, admitió que el convenio costaría $63 millones por los tres años de vigencia. En su propuesta inicial, la Utier solicita que en cada año se aumente 6%, 7% y 8% el salario de los empleados.

"Estamos dispuestos a negociarlo, pero ellos (la administración) no ha presentado ni una sola propuesta (sobre el aumento de salario)", dijo Figueroa Jaramillo.

Entre otros asuntos, la Utier solicita un tope a la cantidad de horas trabajadas que la AEE le puede imponer a sus empleados. Según el ex presidente de la Utier y portavoz en la mesa de negociación, Ricardo Santos, accidentes en el que unionados han muerto han sido atribuidas por la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA, por sus siglas en inglés) a la cantidad de horas trabajadas de forma consecutiva.

Santos también apuntó que "sin haber propuesto un aumento de salario", la AEE busca aumentar la aportación de los empleados al plan médico. Asimismo, denunció que la administración pretende eliminar la licencia por accidentes en el trabajo.

Por otro lado, el presidente de la Utier rechazó los señalamientos de que realizar la huelga a sólo semanas de las elecciones demostraba que las intenciones reales son de índole político.

"Ellos van a justificar su inacción en la mesa de negociación con lo que en el país muchas veces divide, que es la política. La realidad es que los trabajadores tenemos el derecho a ejercer la presión en el momento que sea más pertinente", dijo Figueroa Jaramillo.

 "Si quiere resolver esto y desvarar esa posibilidad, que tiene un fin político, lo que tienen que hacer es acordar el convenio colectivo. Inmediatamente se acuerde, la Utier se retira del proceso huelgario", afirmó.