Matanzas, Cuba. Al menos 17 bomberos están desaparecidos durante el intento de sofocar el incendio provocado por la explosión de un depósito de combustible en Matanzas, en el occidente de Cuba, informó este sábado la Presidencia.

El Gobierno de la isla ha solicitado ayuda y asesoramiento internacional con experiencias en el tema petrolero al tiempo en el que las llamas continúan.

Hasta el momento, los heridos ascienden a 67: tres en condición crítica, tres muy graves, 12 graves, 20 menos graves y 29 leves, además de los bomberos “desaparecidos”.

El hospital provincial Comandante Faustino Pérez de Matanzas, el que más heridos ha recibido tras el incendio activo en dos de los ocho de crudo en esa región, confirmó a Efe que hay cinco ingresados, uno de ellos, en estado crítico.

Getter Robaina Rodríguez, subdirectora del hospital, apuntó este sábado que el centro ha recibido un total de 56 lesionados hasta el momento.

Rodríguez agregó que siete personas fueron enviadas a La Habana por un “tema meramente geográfico” y que no hay una saturación en Urgencias.

Los depósitos de crudo afectados, con una capacidad de 50,000 metros cúbicos, se encuentran en la Base de Supertanqueros de un área industrial de Matanzas, cerca de la termoeléctrica Antonio Guiteras, una de las mayores de Cuba.

El incendio no está aún controlado, según han apuntado los medios oficiales.

El presidente del país, Miguel Díaz-Canel, y su primer ministro, Manuel Marrero, se desplazaron a Matanzas en la madrugada para seguir de cerca la evolución del suceso y visitaron a los heridos en el cercano hospital provincial Faustino Pérez.

De acuerdo con la televisión estatal, algunas familias de Matanzas fueron evacuadas en los barrios de la ciudad más próximas al área industrial afectada, ante el riesgo de que se extiendan las llamas.

Una gran columna de espeso humo negro se extiende desde el lugar del siniestro y ya es visible en La Habana, a un centenar de kilómetros de ahí.

El incendio comenzó el viernes a eso de las 7:00 p.m. hora local cuando una descarga eléctrica impactó en uno de los ocho depósitos de crudo de la base.

Se desató entonces un fuego que afectó a un depósito y que en un primer momento pareció controlado, según habían informado los medios oficiales de la isla.

No obstante, el fuerte viento dificultó las labores de extinción y llevó las llamas hasta un segundo tanque y, sobre las 7:00 a.m. hora local del sábado provocó una nueva gran explosión en otro tanque.

Cuba confirmó que coordina con Estados Unidos la ayuda ofrecida por ese país ante el gran incendio que sigue activo.

El viceministro cubano de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío, escribió en Twitter que el Gobierno estadounidense “ofreció asesoría técnica, propuesta ya en manos de los especialistas para la debida coordinación”.

“Agradecemos profundamente condolencias y expresiones de ayuda de diversas organizaciones y personas de Estados Unidos con motivo del siniestro en Matanzas”, añadió el vicecanciller.

La Embajada de Estados Unidos en Cuba informó también en Twitter que estaba “en contacto con Cuba sobre el incidente en Matanzas”.

“Mientras tanto, queremos dejar claro que la ley de Estados Unidos autoriza a las entidades y organizaciones estadounidenses a proporcionar ayuda y respuesta ante desastres en Cuba”.