Nueva York.- El avión que descendió en el río Hudson perdió potencia en sus dos motores al mismo tiempo, luego de haber alcanzado apenas un altura de unos 975 metros (3,200 pies), según indicaron el domingo las dos grabadoras de datos de vuelo de la nave.

Los detalles surgidos hasta ahora han confirmado las complicadas circunstancias en las que el piloto del avión de la empresa US Airways, con 155 personas a bordo, maniobró el avión sobre la ciudad de Nueva York y acuatizó en el río luego de golpear una parvada de gansos la tarde del jueves.

"El capitán se comunica por radio con (los controladores de tráfico aéreo) pidiendo auxilio y reporta que golpearon pájaros, perdiendo ambos motores y que estaban regresando a LaGuardia", dijo Kitty Higgins, miembro de la Oficina Nacional de Seguridad en el Transporte, al dar a conocer el contenido de las grabadoras de voz y datos de la nave.

Los restos del Airbus A320 estaban siendo transportados en una barcaza hacia Nueva Jersey, el domingo por la noche, a fin de que los investigadores pudieran evaluar los alcances de los daños de manera más cercana. Bajo una fuerte nevada, varios remolcadores empezaron a arrastrar la barcaza, que se encontraba varada en un dique a unas cuantas cuadras de donde se encontraba el Centro de Comercio Mundial.

Las autoridades han encontrado daños importantes en la cola y los compartimientos al fondo de la nave, que se abrieron con el impacto, dijo Higgins.

La búsqueda del motor izquierdo de la nave fue suspendido hasta el martes, debido al hielo en el río, que hace demasiado peligroso el mandar buzos o equipos de sonar, dijo Higgins.

La funcionaria se deshizo en halagos para la tripulación, empezando por el capitán Chesley B. "Sully" Sullenberger, quien habló con los investigadores el sábado.

"Los milagros ocurren debido a muchas cosas que se hacen diariamente durante años, años y años. Estas personas sabían qué se supone debían hacer y lo hicieron, y consecuentemente nadie perdió la vida", dijo.

Sullenberger tenía programada su primera entrevista pública para la mañana del lunes con el presentador Matt Lauer, del programa "Today" de la cadena NBC, pero ello fue suspendido el domingo a pedido de la Asociación de Pilotos de Aerolínea de Estados Unidos.

Stephen Bradford, presidente de la asociación, dijo que le pidió a Sullenberger no participar con los medios porque la asociación de pilotos tiene el estatus de "parte interesada" en las investigaciones del caso, lo que le permite participar directamente en ellas.

Sullenberger emitió una declaración donde señala la recomendación que se le hizo y dice que "los Sullenberger continúan dándole las gracias a las personas bien intencionadas por sus increíbles muestras de apoyo".

El alcalde de su poblado natal, Danville, California, dijo que el piloto y su familia estarían presentes en la asunción del presidente Barack Obama.

La zona donde estaba varada la barcaza estuvo cerrada al público el domingo, pero atrajo a miles de residentes locales y turistas, que tomaron fotografías a los restos del avión.

El alcalde Newell Arnerich informó que Lorraine Sullenberger le dijo a las autoridades de la ciudad que la familia partiría a la capital nacional el domingo. Ella y sus hijas no han visto a Sullenberger desde que fue señalado como un héroe tras salvar la vida de las 155 personas a bordo.

La NTSB informó que los datos del radar confirmaron que la trayectoria del avión se entrecruzó con la de un grupo de "blancos primarios", casi seguramente aves, tras el despegue, encima del barrio del Bronx. Esos "blancos" no aparecieron en la pantalla del radar del controlador del tráfico aéreo que aprobó el despegue, dijo más temprano Higgins.T