Nueva Zelanda ha sido testigo hoy de tres fuertes terremotos.

El más fuerte y más reciente fue estimado por el Servicio Geológico de Estados Unidos en magnitud 8.1. Este provocó que se emitiera un aviso de tsunami en el Pacífico para múltiples islas. Incluso Hawai está bajo vigilancia de tsunami.

El epicentro del movimiento de tierra fue localizado en la latitud 29.7° sur, longitud 177.2 grados oeste. Se estima que ocurrió a una profundidad de 10 kilómetros.

Más temprano, un terremoto de magnitud 7.3 golpeó las aguas al noreste de Nueva Zelanda, lo que produjo una alerta de tsunami inicial que luego fue retirada, sin que se hayan registrado de momento daños materiales o víctimas.

Más tarde en el día, otro sismo de magnitud 7.5 impactó la misma zona.

Nueva Zelanda, con una población 4,6 millones de habitantes, se asienta en la falla entre las placas tectónicas del Pacífico y Oceanía y registra unos 14,000 terremotos cada año, de los que entre 100 y 150 tienen la suficiente potencia como para ser percibidos.

El 22 de febrero de 2011 murieron 185 personas en un sismo de magnitud 6.3 que sacudió la ciudad de Christchurch, en la isla Sur, y que causó daños en 30,000 edificios.