Bruselas. La policía belga detuvo a 132 personas que participaron en una fiesta ilegal en un parque de Bruselas para protestar por las restricciones del COVID-19, según dijo la policía el domingo.

Unas 15 personas, entre manifestantes y policías, resultaron heridas en enfrentamientos, según la vocera policial Ilse Van de Keere.

Unas 2,000 personas se habían congregado el sábado en el parque por segunda ocasión este mes. La policía empleó gas lacrimógeno y cañones de agua para dispersarlos.

Policías y manifestantes repartidos por la zona chocaron hasta bien entrada la noche. El gobierno y la policía llevaban una semana advirtiendo a la gente que se mantuviera alejada de la fiesta, sin éxito. Se produjeron altercados cuando empezaron a llegar grandes multitudes por la tarde.

Algunos manifestantes se reunieron en torno a una hoguera coreando “¡Libertad!” y “¿Dónde está la fiesta? ¡Aquí está la fiesta!”. Algunos arrojaron objetos a la policía.

Bélgica aún mantiene estrictos límites a las grandes aglomeraciones e insiste en que la gente lleve mascarilla en multitudes.