Lagos. El Ejército de Nigeria mató a más de 100 combatientes del grupo yihadista Boko Haram en una operación llevada a cabo en el estado nororiental de Borno el pasado 20 de diciembre, confirmaron fuentes castrenses.

Tras una primera ola de ataques aéreos ese día en la aldea de Mantari, en la localidad de Bama, “algunos terroristas que habían sobrevivido volvieron al mismo lugar para evacuar los cuerpos”, explico en un comunicado que recogen hoy medios locales el portavoz de las Fuerzas Aéreas de Nigeria, Edward Gabkwet.

“Esto supuso una oportunidad para otro ataque (...) en el que más de 100 terroristas fueron neutralizados”, añadió Gabkwet, al detallar que entre los yihadistas abatidos se encontraban varios líderes del grupo.

El pasado jueves, el Ejército nigeriano confirmó que había matado en otras operaciones llevadas a cabo durante las últimas tres semanas en diferentes zonas de Borno a al menos otros 103 combatientes de Boko Haram y de su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP).

Los militares nigerianos también lograron rescatar a treinta rehenes civiles, mientras 280 terroristas y sus familias -incluidos 29 hombres, 73 mujeres y 148 menores- se entregaron y 22 fueron detenidos.

El noreste de Nigeria es blanco de ataques de Boko Haram desde 2009, una violencia que se agudizó a partir de 2016 con la aparición del ISWAP.

Ambos grupos buscan imponer un Estado de corte islámico en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiano en el sur.

Boko Haram y el ISWAP han matado a más de 35.000 personas y han causado unos 2.7 millones de desplazados internos, sobre todo en Nigeria, pero también en países vecinos como Camerún, Chad y Níger, según datos gubernamentales y de la ONU.