Con 30 años y 266 días al 1 de febrero, Bobi de Portugal se convirtió oficialmente en el perro vivo más viejo del mundo y el perro más viejo de la historia, según anunció este jueves Guinness World Records mediante un comunicado de prensa.

Bobi, de la raza portugués Rafeiro do Alentejo, nació en la finca de su familia en Conqueiros el 11 de mayo de 1992. Leonel, el dueño de Bobi, tenía 8 años cuando nació el longevo can.

“Bobi ha sido un guerrero durante todos estos años, solo él sabe cómo ha estado aguantando, no debe ser fácil porque el promedio de vida de un perro no es tan alto y si solo hablara, podría explicar este éxito. Estamos muy contentos y agradecidos con la vida por permitirnos, después de 30 años, tener a Bobi en nuestro día a día”, expresó Leonel.

Bobi fue descrito como un perro muy tranquilo y sociable, incluso se lleva bien con sus cuatro hermanos felinos. También le gusta que lo acaricien y le encanta comer. El perro suele consumir los mismos alimentos que sus dueños, pero tienen cuidado de que sea apta para él.

Su longevidad se debe a que siempre ha vivido en el campo, en un ambiente tranquilo y pacífico, rodeado de naturaleza, según consideró su familia.

Bobi sufrió un problema de salud en el 2018, pero se recuperó y hoy en día lleva una vida normal, a pesar de algunas dificultades con la vista y para caminar, que surgen con la edad.

En 1992, Bobi fue registrado con el Serviço Medico-Veterinário do Município de Leiria, que confirmó la fecha de nacimiento. La edad de Bobi también fue verificada por el SIAC, una base de datos de mascotas autorizada por el gobierno portugués y administrada por el Sindicato Nacional dos Médicos Veterinários.

Antes de Bobi, el perro vivo más viejo del mundo era Spike de Ohio, con un récord de 23 años y 7 días.

El récord del perro más viejo de la historia lo ostentaba Bluey, que vivió 29 años y 5 meses antes de morir en noviembre de 1939.