Atenas. El Parlamento de Grecia decidirá este jueves si legaliza el matrimonio y la adopción de niños para homosexuales, en una votación a la que el partido conservador, en el Gobierno, acude dividido y con la Iglesia ortodoxa reclamando una votación nominal para presionar a los diputados.

El 46% de los griegos está a favor de la legalización del matrimonio homosexual, mientras que un 47% se opone, según una reciente encuesta publicada por la televisión privada SKAI.

El cambio legal, una promesa electoral del primer ministro conservador, Kyriakos Mitsotakis, será votada previsiblemente al final del día y, si es aprobada, hará de Grecia el primer país cristiano ortodoxo del mundo que equipare los derechos de los homosexuales en materia de matrimonio y adopción con el del resto de ciudadanos.

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Además de legalizar el matrimonio entre dos personas “independientemente de su sexo”, el cambio legal pretende regularizar la precaria situación en la que se encuentran muchos hijos de progenitores homosexuales, ya que, hasta ahora, solo a uno de los miembros de la pareja se le reconoce los derechos sobre los menores.

La Iglesia ortodoxa, que se ha opuesto de manera contundente al proyecto, pidió ayer que la votación sea nominal, obligando a que cada diputado manifieste a viva voz el sentido de su voto.

Esta reclamación se interpreta como una forma de presionar a los legisladores de Nueva Democracia (ND), el partido conservador de Mitsotakis que ganó las elecciones el pasado junio con mayoría absoluta.

La muy influyente Iglesia se opuso desde un principio a la ley bajo el argumento que esta “abolirá la paternidad y la maternidad” en Grecia, un país que en su Constitución aún reconoce el cristianismo ortodoxo como religión predominante.

Mitsotakis ha defendido el proyecto indicando que “no es aceptable que existan ciudadanos con menos derechos que otros”.

Sin embargo, casi un tercio de los 158 diputados de ND, así como uno de los ministros y varios viceministros, han dejado claro que votarán en contra o se abstendrán.

También se opondrán los diputados de tres formaciones de extrema derecha, así como los del Partido Comunista.

No obstante, se espera que el cambio sea aprobado con holgura ya que lo apoyan los dos principales partidos de la oposición, el izquierdista Syriza y el socialdemócrata Pasok.

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó en 2013 a Grecia por violar los derechos humanos al negarse a incluir a parejas del mismo sexo en acuerdos de convivencia.

La diputada de ND María Syrengela calificó la reforma durante el debate de ayer como “una pequeña contribución a la creación de una sociedad sin discriminación”.

Desde 2015, las parejas homosexuales en Grecia tienen el derecho a contraer uniones civiles, gracias a una ley que fue presentada ese año por el entonces primer ministro, Alexis Tsipras, del partido Syriza.