La Policía portuguesa dijo haber encontrado restos óseos y ropa la semana pasada en una zona cercana al complejo turístico en el que desapareció en la que realizaban una búsqueda de posibles rastros de la niña británica Madeleine McCann en el 2007, según informó el diario británico ‘The Mirror’.

En esta ocasión, la policía portuguesa realizó excavaciones en 21 terrenos de la región de Algarve, en 48 hectáreas ubicadas dentro del municipio de Lagos y áreas cercanas al complejo turístico donde se hospedaba la pequeña con su familia al momento de su desaparición. De acuerdo con el comunicado oficial difundido por la Policía Judicial del país, este procedimiento tenía como finalidad responder a la petición realizada por la Fiscalía de Braunschweig, quien, desde 2022, vinculó como principal sospechoso a Christian Brückner.

Las autoridades añadieron que todas las pruebas reunidas fueron enviadas a la Oficina Federal de Policía Criminal (BKA) en Alemania, para analizar cualquier rastro relacionado con el caso de la menor.

Dentro de los informes preliminares, los agentes también señalaron que, en los límites con el territorio de Atalaia, identificaron una casa de campo abandonada, la cual fue habitada por el sospechoso hace años.

A pesar de que Christian Brückner no ha sido acusado formalmente por la desaparición de la menor y en repetidas ocasiones ha negado su vinculación, las autoridades lograron determinar que el hombre estaba en las proximidades del complejo turístico el día del incidente.

Si bien los expertos aún no confirman si existe alguna relación entre los objetos encontrados y el caso de Madeleine McCann, se espera que estos puedan servir como pruebas contra el sospechoso, ya que quedará en libertad a finales del 2025, tras pagar una condena por violación.

Las últimas diligencias policiales fueron realizadas en 2023, a pesar de que las autoridades alemanas habían dado por muerta a la niña tres años antes, luego de no encontrar evidencias que lograran aclarar la desaparición.