Holanda implementó hoy, domingo, un confinamiento más estricto por el repunte de casos de coronavirus.

Bares, restaurantes, tiendas no esenciales, cines y teatros son algunos de los espacios públicos que deberán cerrar desde las 5:00 p.m. y hasta las 5:00 a.m. bajo las nuevas medidas de confinamiento.

Las restricciones entraron en vigor horas después de que el ministro de Salud Hugo de Jonge anunció que por lo menos 13 viajeros que llegaron al Aeropuerto Internacional de Ámsterdam-Schiphol el viernes dieron positivo a la nueva variante. Pidió a otras personas que arribaron a la nación la semana pasada del sur de África que se sometieran a una prueba.

“Hemos pedidos a todos los que han estado en el sur de África en la última semana que se reporten ante las autoridades sanitarias locales... para que hagan otra cita para la prueba” de coronavirus, comentó.

Holanda ha registrado récords de contagios en las últimas semanas y el confinamiento parcial anterior parece haber tenido pocos efectos. Los hospitales holandeses han alertado que las unidades de terapia intensiva podrían verse abrumadas para finales de la semana. El Gobierno ordenó que se pospongan todas las cirugías no esenciales, así como los reemplazos de cadera, para liberar camas en las unidades de terapia intensiva para atender a pacientes con COVID-19.

De Jonge dijo que no podía descartar la posibilidad de imponer más restricciones de cara a la temporada navideña.

No todos, sin embargo, están complacidos con las nuevas medidas restrictivas.

Wilko Klippens, que opera la cafetería Biessels en la plaza de Grote Markt en la ciudad de Nimega, dijo que el confinamiento acabará con sus ahorros.

“Vamos a mantener a todo el personal. Van a poder pagar su renta y su educación. Así que sí, recae sobre nosotros”, comentó. “El dinero que ahorramos para nuestra jubilación es el dinero con el que pagaremos al personal y la renta”.