Sao Paulo. El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó que la candidatura a la reelección de su homólogo estadounidense, Joe Biden, es “un estímulo” para él intentar renovar su mandato en 2026, cuando tendrá cerca de 81 años.

“Cuando fui a Hiroshima (para la reunión del G7) me encontré con el presidente Biden y le pregunté si era verdad que iba a concurrir” a los comicios de 2024. Me dijo: ‘Sí, voy a hacerlo’. Eso es un estímulo para mí, porque yo soy más joven que él”, dijo Lula en un adelanto de la entrevista que concedió a la cadena SBT.

Lula tiene actualmente 77 años y acaba cumplir los seis primeros meses de su tercer mandato, pues ya gobernó anteriormente en dos periodos, entre 2003 y 2010, en tanto que Biden, de 80 años, ha anunciado su intención de disputar las primarias demócratas para las elecciones de 2024.

El líder progresista brasileño aseguró en la pasada campaña electoral que no buscaría repetir mandato en 2026, pero desde que asumió el poder, el 1 de enero, ha dejado la puerta abierta a disputar la reelección.

En febrero, insinuó que dependiendo de la situación económica del país valoraría volver a ser candidato a la Presidencia y ahora mencionó a Biden como un “estímulo” para intentarlo.

No obstante, subrayó que hablar sobre su posible candidatura en este momento “sería una irresponsabilidad”.

“Es importante que tengamos mucha paciencia, mucho cuidado. No permitiré que mis ministros hagan política antes de tiempo” y solo podrán hacerlo a partir de “marzo-abril de 2026″, aseveró Lula.

En este contexto, indicó que él “trabaja mucho” para que su Gobierno tenga un candidato en 2026, aunque en el trecho de la entrevista adelantado por SBT, no especifica si habla de él o de alguno de sus ministros.

Para las elecciones presidenciales de 2026 no podrá presentarse el expresidente Jair Bolsonaro, el mayor adversario político de Lula y quien perdió la reelección el año pasado ante el dirigente progresista.

Bolsonaro, líder de la extrema derecha, fue inhabilitado ocho años por el Tribunal Superior Electoral (TSE), que le condenó por “abuso de poder político” en los comicios de 2022, al emprender una dura campaña de desprestigio contra el sistema electoral y las instituciones democráticas.