En una carrera contra el tiempo, científicos italianos estudian, analizan y toman muestras del glaciar más austral de Europa antes de que se derrita y desaparezca debido al alza de las temperaturas globales.

Los investigadores realizaron un estudio preliminar por radar del glaciar Calderone en los montes Apeninos centrales el 13 de marzo y planean regresar el mes próximo para trepanarlo y tomar muestras. Esas muestras serán almacenadas en la Antártida para su futuro estudio.

“Este glaciar puede narrarnos la historia climática y ambiental del Mediterráneo”, dijo Jacopo Gabrieli, investigador del Instituto de Ciencias Polares en el Consejo Nacional de Investigaciones italiano.

Un helicóptero de bomberos parte después de transportar a científicos, en las laderas del monte Gran Sasso d'Italia en el centro de Italia. (Riccardo Selvatico/CNR y Universidad Ca Foscari vía AP)
Un helicóptero de bomberos parte después de transportar a científicos, en las laderas del monte Gran Sasso d'Italia en el centro de Italia. (Riccardo Selvatico/CNR y Universidad Ca Foscari vía AP) (Riccardo Selvatico)

The Associated Press acompañó a Gabrieli y su equipo al glaciar cubierto de nieve para el estudio con radar. Arribaron a la cima en helicóptero y recorrieron la ladera del macizo Gran Sasso. Los investigadores exploraron el terreno con equipos electromagnéticos para determinar la estratificación del glaciar.

El estudio permitirá “registrar la profundidad y morfología entre la nieve y el hielo y entre el hielo y la roca. Así podemos medir los grosores y reconstruir la morfología del fondo del glaciar”, dijo Stefano Urbini, investigador del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, quien participó del estudio.

El pequeño glaciar italiano, ya partido en dos debido al calentamiento global, es un termómetro crucial del cambio climático y un tesoro de información atmosférica. Los glaciólogos esperan encontrar una capa de hielo de 25 metros de espesor bajo la nieve y los escombros que cubren el glaciar.

Científicos caminan por las laderas del monte Gran Sasso d'Italia, en el centro de Italia. (Riccardo Selvatico/CNR y Universidad Ca Foscari vía AP)
Científicos caminan por las laderas del monte Gran Sasso d'Italia, en el centro de Italia. (Riccardo Selvatico/CNR y Universidad Ca Foscari vía AP) (Riccardo Selvatico)

Las muestras del Calderone irán al archivo mundial “Memoria del Hielo” en la Antártida, un congelador natural en construcción en la estación franco-italiana Concordia donde se almacenarán a 50 grados bajo cero.

Según los investigadores italianos, los glaciares a una altura inferior a 3,600 metros desaparecerán para 2100 si las temperaturas siguen aumentando al paso actual. El Calderone, a una altura de 2,700 metros, podría derretirse mucho antes, para 2050, si no se toman medidas drásticas, dicen los expertos.

“Por medio de estos glaciares, por medio del interés que sentimos por estos ambientes fantásticos, podemos explicar cómo cambia el clima, por qué cambia, cómo lo impacta el hombre y qué podemos hacer para reducir nuestro impacto sobre el planeta”, dijo Gabrieli.