LONDRES. Kate Middleton, la princesa de Gales, se disculpó por la “confusión” causada por su edición a una foto familiar publicada por el palacio, una imagen de ella y sus hijos que pretendía calmar la preocupación y las especulaciones sobre la salud de la integrante de la familia real británica, pero que tuvo el efecto contrario.

Varias agencias de noticias que publicaron inicialmente la foto, incluida The Associated Press, retiraron la imagen por dudas sobre la manipulación digital. La fotografía divulgada por la oficina de la pareja en el Palacio de Kensington el domingo para conmemorar el Día de la Madre en Gran Bretaña, era la primera fotografía oficial de Middleton, de 42 años, desde que se sometió a una cirugía abdominal hace casi dos meses.

Relacionadas

Las retractaciones hicieron que los rumores en internet, ya de por sí desenfrenados por la operación y recuperación de la futura reina se multiplicaran. El desastre de relaciones públicas es una prueba más de que el mantra de larga data de la familia real de “nunca te quejes, nunca expliques” es imposible en una era saturada de redes sociales.

En una publicación en redes sociales, Kete dijo el lunes que “como muchos fotógrafos aficionados, ocasionalmente experimento con la edición”.

“Quería expresar mis disculpas por cualquier confusión causada por la fotografía familiar que compartimos ayer”, agregó.

En el pasado, el palacio ha publicado varias de las instantáneas familiares tomadas por Middleton, en las que aparecen ella y su esposo, el príncipe heredero William, con sus hijos, el príncipe George, de 10 años, la princesa Charlotte, de 8, y el príncipe Louis, de 5.

La fotografía más reciente fue tomada por William, dijo el Palacio de Kensington. En el mensaje que la acompañaba, Catalina dijo: “Gracias por sus amables deseos y su apoyo continuo durante los últimos dos meses. Les deseo a todos un Feliz Día de la Madre”.

Si bien no había indicios de que la fotografía fuera falsa, AP se retractó de su publicación porque una inspección más detallada reveló que la fuente había manipulado la imagen de una manera que no cumplía con los estándares fotográficos de la organización noticiosa. Por ejemplo, contenía una inconsistencia en la alineación de la mano izquierda de la princesa Carlota con la manga de su suéter.

Otras agencias de noticias importantes, incluidas Getty, Reuters, AFP y la agencia nacional del Reino Unido, PA, también retiraron la fotografía.

El Palacio de Kensington dijo que no publicaría la fotografía original sin editar. Y aunque la declaración de Kate proporcionó cierta aclaración, parece poco probable que haya servido para detener el remolino de rumores que se ha acelerado durante su ausencia de eventos públicos.

El ex corresponsal de la BBC especializado en realeza, Peter Hunt, dijo que la publicación de fotografías mal manejadas “es perjudicial para la realeza”.

“Sabían que habría un gran interés por cualquier foto que publicaran de Kate”, escribió en X, antes conocido como Twitter. “Su desafío es que las personas ahora se preguntarán si se puede confiar en ellos y creerles la próxima vez que publiquen una actualización sobre su estado de salud”.

La familia real está bajo un escrutinio particular porque el rey Carlos III también ha tenido que cancelar sus compromisos públicos al someterse a un tratamiento para una forma no especificada de cáncer. El monarca ha cancelado todos sus deberes públicos, aunque ha sido fotografiado caminando a la iglesia y reuniéndose en privado con funcionarios y dignatarios del gobierno.

La relativa franqueza de Carlos sobre su diagnóstico fue un nuevo punto de partida para la familia real, generalmente reservada. Pero se ha visto eclipsado por el interés popular sobre Kate. Ante la falta de información clara, las teorías de la conspiración se han apresurado a llenar el vacío.

La publicación de la foto del Día de las Madres siguió a semanas de chismes en redes sociales sobre lo que le había sucedido a Kate desde que salió de un hospital el 29 de enero, luego de dos semanas internada por una cirugía planificada. La princesa no se había visto públicamente desde Navidad.

La princesa se sometió a una cirugía el 16 de enero y su estado de salud y el motivo de la operación no han sido revelados, aunque el Palacio de Kensington dijo que no está relacionado con el cáncer.

El palacio dijo inicialmente que sólo se proporcionarían actualizaciones significativas y que la princesa no volvería a los deberes reales antes de Pascua, el 31 de marzo de este año. Tras esto publicó un comunicado el mes pasado diciendo que estaba bien.

Entonces, asesores reales dijeron al periódico The Sun: “Hemos visto la locura de las redes sociales y eso no va a cambiar nuestra estrategia. Ha habido mucho en las redes sociales, pero la princesa tiene derecho a la privacidad y pide al público que lo respete”.

La semana pasada surgieron más preguntas cuando el ejército británico pareció precipitarse al anunciar que Kate asistiría a una ceremonia del Desfile del Estandarte en junio, aparentemente sin consultar a los funcionarios del palacio.

Corresponde a los funcionarios del palacio, no a los departamentos gubernamentales, anunciar la asistencia de la realeza a los eventos. El Palacio de Kensington no confirmó ningún evento público programado para Kate, y el ejército eliminó más tarde la referencia a su asistencia.

El príncipe William, la reina Camila y otros miembros de la realeza asistieron a una misa del Día de la Mancomunidad de Naciones en la Abadía de Westminster el lunes. Ni Kate ni el rey estuvieron en la misa, que atrajo a decenas de manifestantes antimonárquicos con carteles que decían “Abajo la corona”.

William también iba a dar un discurso en un evento para el Premio Earthshot, una competencia ambiental que él fundó.

El consultor de relaciones públicas veterano Mark Borkowski dijo que el tropezón de la foto expuso un problema de relaciones públicas más amplio para la monarquía.

“No parece haber mucho pensamiento estratégico conjunto en el seno de la familia real en este momento, lo que lleva a estos problemas de una organización muy difícil de manejar en términos de relaciones públicas”, dijo.

“Creo que han estado a la altura del desafío, proporcionando la declaración como una explicación”, dijo sobre la disculpa de Catalina. “La cuestión es si con todas las teorías de la conspiración que circulan la gente lo cree. Y no estoy seguro de que lo hagan”.