La policía en Alemania dijo el jueves que estaban investigando la aparición de esvásticas pintadas con sangre humana en docenas de autos, algunos buzones y fachadas de edificios en la ciudad central de Hanau.

El portavoz de la policía, Thomas Leipold, afirmó que los agentes fueron alertados la noche del miércoles cuando un hombre dijo haber visto la forma de una esvástica aplicada con un líquido rojizo en un auto estacionado.

Una prueba especial reveló rápidamente que la sustancia era sangre humana.

La policía dijo que, en total, casi 50 autos habían sido marcados de manera similar.

El contexto es completamente incierto”, señaló Leipold. Los investigadores no sabían si las marcas se habían realizado en autos, buzones y edificios específicos o si las esvásticas se dibujaron al azar. Indicó que también había varios otros mensajes garabateados en autos y edificios de los que no pudo dar más datos.

No había indicios de quién está detrás de esto o de dónde provino la sangre, señaló Leipold. Añadió que las autoridades no estaban al tanto de ninguna lesión en relación con los incidentes.

Por ahora, la policía está investigando daños a la propiedad y el empleo de símbolos de organizaciones inconstitucionales.

La exhibición de emblemas nazis, incluida la esvástica, es ilegal en Alemania. La esvástica está ampliamente considerada como un símbolo de odio que evoca el trauma del Holocausto y los horrores de la Alemania nazi. Los supremacistas blancos, grupos neonazis y vándalos han continuado usándola después del final de la II Guerra Mundial, para sembrar miedo y odio.

Hanau fue noticia hace cinco años cuando un atacante alemán disparó y mató a nueve personas con raíces inmigrantes en un ataque a un bar de narguile en la ciudad, en uno de los peores casos de terrorismo doméstico desde la II Guerra Mundial.