Era un "sálvese quien pueda". 

Así se vivieron las peores horas del incendio en la torre de 24 pisos en Londres, tragedia por la que ya murieron al menos 17 personas. La desesperación era total, como aquel momento en que a una mujer arrojó por la ventana a un bebé desde el noveno o décimo piso, para que alguien lo recibiera abajo.

Según han publicado diversos medios, la criatura fue salvada. "La mujer estaba gritando, envolvió al bebe con sábanas y lo tiró por fuera de la ventana. Alguien del público abajo milagrosamente lo atrapó en el momento justo", dijo una señora que presenció la escena inverosímil.

No fue esa la única situación de terror. Fueron varios los vecinos que saltaron desde las alturas por salvar sus vidas, en medio de unas llamas que cada vez se volvían más voraces.

"Algunas pudieron refugiarse en lo de vecinos o amigos", dijo Khan respecto de la tragedia.

Hasta ahora, no ha sido confirmada la causa del fuego. Si bien varias versiones indican que podría tratarse de un desperfecto técnico en un electrodoméstico del cuarto piso del edificio de viviendas públicas, las autoridades del gobierno no confirmaron la información.

Este fatal accidente golpea a una ciudad ya debilitada, tras los atentados terroristas en el puente de Londres y el mercado de Borough, y en medio de una elección que dejó a la primera ministra Theresa May con poco respaldo y menos margen para formar gobierno.