Lima. Miles de ciudadanos marcharon este sábado por las calles del centro histórico de Lima para reivindicar y exigir “respeto, tolerancia e inclusión” durante la Marcha del Orgullo 2023 que se celebró en la capital peruana.

La concentración comenzó en el céntrico Campo de Marte y reunió a integrantes y activistas del colectivo LGTBI+, junto con artistas, personalidades y políticos de diversas tendencias ideológicas.

Jorge Apolaya, vocero del colectivo “Marcha del Orgullo LGBTI de Lima”, declaró a EFE que esta “marcha número 21 en el Perú se da en un contexto súper adverso de los derechos humanos LGBTI, sobre todo por una clase política que intenta arrebatarnos la democracia”.

“Estamos frente a un país que se rehúsa a ver los derechos humanos LGBTI. En ese sentido, somos casi el único país que no ha legislado a favor de estos derechos humanos LGBTI, no tenemos ley de matrimonio igualitario, no tenemos ley de identidad de género, no tenemos una ley que tipifique los crímenes de odio”, denunció.

Apolaya aseguró que, por ese motivo, “esta marcha se convierte en un espacio de reivindicación, pero también en un espacio de revolución para decir aquí estamos y que nuestras presencias son importantes para exigir cambios en el país”.

El vocero también manifestó su disconformidad con la decisión de la Municipalidad Metropolitana de Lima, que lidera el alcalde conservador Rafael López Aliaga, de no autorizarlos a llegar hasta la Plaza San Martín, el emblemático punto de encuentro de las grandes manifestaciones y marchas en la capital peruana.

“No nos hace feliz haber salido de la Plaza San Martín, creemos que esa ordenanza de intangibilidad es inconstitucional; sin embargo, el poder ciudadano, el poder de las personas LGBTI, está en las calles, y hoy lo estamos expresando”, remarcó.

El activista enfatizó, finalmente, que este sábado se vivió “una marcha pacífica, llena de color, de brillo, pero también de arenga, de protesta”, con la intención de “demostrar que somos miles de miles en las calles y vamos a seguir exigiendo la igualdad”.

La exministra de la Mujer, Diana Miloslavich, también asistió a la marcha y aseguró que además de ser “un día en favor de la comunidad” LGTBI+, “también es de la democracia y por los derechos”.

En ese sentido, cuestionó que la municipalidad de Lima no haya autorizado para que la concentración llegue hasta la Plaza San Martín, a pesar de que “casi todas las ciudades del mundo le dan un espacio a la Marcha del Orgullo”.

“Casi todas las ciudades de América Latina, como está pasando hoy día, tienen alcaldes democráticos, pero como el nuestro no es democrático, no nos ha dejado terminar en la Plaza San Martín”, dijo.

Miloslavich informó que una encuesta reciente ha señalado que 1,8 millones de peruanos declaran pertenecer a la comunidad LGTBI+ y dijo que las autoridades y políticos de su país tienen “que ser conscientes y darle las mejores condiciones de derechos a esa población tan grande”.

Al término del recorrido por calles céntricas de la capital peruana, que estuvo acompañado por carros alegóricos y gigantescas banderolas multicolores, los manifestantes regresaron hasta la Alameda 28 de julio, donde se presentó un espectáculo musical y artístico.

La Marcha del Orgullo 2023 en Perú también se realizó con pasacalles coloridos y pacíficos en otras ciudades del país, entre ellas las sureñas Arequipa y Cusco, y la norteña Chiclayo.