Nueva York. La Asamblea General de la OEA aprobó el viernes una resolución que declara que las elecciones presidenciales en Nicaragua “no fueron libres, justas o transparentes y carecen de legitimidad democrática”.

La resolución pide instruir al Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos a que analice la situación en el país centroamericano, realice un informe antes del 30 de noviembre y entonces se tomen “acciones apropiadas”.

La resolución fue aprobada al final de la 51ª Asamblea General de la OEA, que se llevó a cabo de forma virtual desde el miércoles. Veinticinco países de la organización votaron a favor de la resolución y siete, entre ellos Honduras, México, y Bolivia, se abstuvieron. Nicaragua votó en contra, mientras que San Cristóbal y Nieves se encontraba ausente.

Nicaragua llevó a cabo elecciones presidenciales el domingo en las que el presidente Daniel Ortega fue reelegido por tercera vez consecutiva. Fueron criticadas internacionalmente por la falta de oposición real y el encarcelamiento de siete aspirantes a la presidencia.

Algunos países de la OEA como Estados Unidos han advertido que sopesan aplicar “consecuencias concretas” para Nicaragua por “abandonar” la democracia. El artículo 21 de la Carta Democrática, por ejemplo, dice que el organismo puede considerar la suspensión de un Estado miembro. El artículo 20 de la carta dice a su vez que, en caso de grave “alteración” de la democracia, se faculta al secretario general o a cualquier país miembro a convocar inmediatamente un Consejo Permanente para evaluar la situación.

Michael René Campbell, representante de Nicaragua ante la OEA, dijo antes del voto del viernes que el pueblo nicaragüense expresó su libre voluntad en unas elecciones pacíficas, que describió como “una de las tareas más hermosas que ha emprendido (Nicaragua) en los últimos años”.

“La OEA no es nuestro Consejo Supremo Electoral. La OEA no tiene la autoridad para constituir nuestra junta receptora de votos. Los funcionarios de la OEA no son ni deben ser fiscales de partidos políticos”, dijo Campbell.

La resolución del viernes también dice que Nicaragua ignoró o rechazó las recomendaciones que la OEA hace desde hace tiempo para “promover la democracia representativa y la protección de los derechos humanos”. El documento señala que el gobierno nicaragüense ha dañado las instituciones democráticas del país, y pide la liberación de los presos políticos.