Rusia advirtió hoy que renunciará a la moratoria sobre el despliegue de misiles de corto y medio alcance si se consuman los planes de Estados Unidos de instalar dicho armamento en la región de Asia-Pacífico.

“La intención de Estados Unidos de adquirir ese potencial y utilizarlo en el marco de su doctrina de doble disuasión es irreversible”, dijo Serguéi Riabkov, viceministro de Exteriores ruso, según informan las agencias locales.

El diplomático subrayó que Moscú está interesada en que Washington no incremente su arsenal en un ámbito controlado antaño por el tratado de eliminación de misiles de corto y medio alcance (INF), denunciado en 2019 por ambas superpotencias nucleares.

Riabkov aludió a los supuestos planes de Estados Unidos de desplegar antes de finales de este año dicho tipo de misiles en su base en la isla de Guam, en el Pacífico Occidental, tras el ensayo realizado en marzo con un misil hipersónico abordo de un bombardero B-52H.

“Si los planificadores estadounidenses consideran que Guam es, por algún motivo, más cómodo, entonces eso será absolutamente urgente y lógico que se evalúen, analicen y se extraigan conclusiones de esto en Moscú, Pekín y otras capitales”, dijo.

Rusia ya aseguró en su momento que “ante la doble disuasión podemos y debemos responder con una doble contramedida”, resaltó.

“Uno de los elementos de dicha reacción será, sin duda, la revisión de nuestra postura sobre la moratoria de dichos sistemas anunciada en 2018 por el presidente Vladímir Putin”, explicó.

Recordó que entonces ya se anunció que la aparición de misiles estadounidenses “en cualquier región del mundo” provocaría una respuesta por parte del Kremlin.

“A medida que los correspondientes planes americanos adquieran un carácter más concreto, nosotros también pasaremos a la fase de determinación práctica sobre cómo reaccionar. Y eso también incumbe totalmente al flanco europeo”, dijo.