Seúl. El líder norcoreano, Kim Jong-un, visitó un cementerio militar para presentar sus respetos a los soldados caídos durante la Guerra de Corea (1950-1953), en vísperas del 70 aniversario del fin del conflicto, informaron hoy medios estatales.

Kim visitó el martes el Cementerio de los Mártires de la Guerra de Liberación de la Patria (nombre que recibe la contienda en Corea del Norte), situado a las afueras de Pionyang, acompañado por el ministro de Defensa norcoreano, Kang Sun-nam, y otros militares del país, según detalló la agencia de noticias norcoreana KCNA.

Durante su visita, Kim dijo que el “milagro del 27 de julio” es una “gran victoria de importancia en la historia de la humanidad, ya que infligió una desgracia y una derrota eternamente indelebles al imperialismo estadounidense, el jefe de la agresión, y previno una nueva guerra mundial”, según recogió el citado medio.

La del martes supuso la primera aparición pública de Kim en 37 días, tras su asistencia a una reunión plenaria el pasado 19 de junio, y estuvo acompañado también por su hermana, Kim Yo-jong.

En las imágenes compartidas por KCNA se puede ver a Kim haciendo una solemne reverencia, además de colocando una corona floral en dicho cementerio, antes de visitar también uno dedicado a las víctimas chinas de la contienda.

La Gran Guerra de Liberación de la Patria es el nombre que recibe en el hermético país asiático la Guerra de Corea, que concluyó el 27 de julio de 1953 con la firma de un alto el fuego.

Corea del Norte suele celebrar el aniversario de esta contienda con un festivo nacional llamado “Día de la Victoria”, puesto que la narrativa del régimen establece que se trató de un triunfo norcoreano porque forzó a Estados Unidos, Corea del Sur y el resto de fuerzas aliadas a pedir un armisticio.