Manila, Filipinas. El tifón Doksuri desprendió techos de lámina de las viviendas, provocó cortes de luz, inundó poblados ubicados en zonas bajas y desplazó a casi 16,000 personas el miércoles cuando impactó una pequeña isla y azotó las provincias del norte de Filipinas con fuertes vientos y lluvia, informaron las autoridades.

De momento no había reportes de víctimas después de que el tifón azotó la isla de Fuga, frente a la ciudad de Aparri, en la provincia de Cagayán, donde 15,843 personas fueron evacuadas de localidades y escuelas en zonas costeras y de alto riesgo. Escuelas y centros de trabajo permanecieron cerrados por precaución ante la llegada de Doksuri. El tifón, que tiene una banda de viento y lluvia de 435 millas de ancho, también desplazó a miles de habitantes de otras provincias del norte del país.

Doksuri se debilitó un poco, pero se mantuvo como un meteoro peligroso y potencialmente letal con vientos máximos sostenidos de 109 millas por hora y ráfagas de hasta 149 mph. Soplaba sobre las aguas costeras frente a la isla de Fuga y la ciudad de Aparri el miércoles por la mañana, informaron los meteorólogos.

“Nuestras localidades costeras en el norte están siendo azotadas”, dijo el gobernador de Cagayán, Manuel Mamba, en entrevista telefónica con The Associated Press. “Estoy recibiendo reportes de techos de lámina que fueron desprendidos e inundaciones que no han podido drenarse probablemente por las marejadas que llegan del mar”.

Una vez que pase el tifón comenzarán las labores de evaluación de daños, pero Mamba teme que se produzcan afectaciones importantes en las granjas de maíz y arroz del valle de Cagayán, las cuales ya habían sido castigadas por una sequía de un mes antes de la llegada de Doksuri. Al menos cuatro localidades enteras se quedaron sin electricidad y seis puentes eran impracticables debido a las inundaciones, según un reporte preliminar de daños de las autoridades en Cagayán.

“Se anticipa que continúen las condiciones violentas y potencialmente mortales” el miércoles en el noroeste de Cagayán y las islas Babuyan, así como en las regiones montañosas del norte en las provincias de Apayao e Ilocos Norte, según un aviso de la agencia meteorológica del país.

Personal de la Guardia Costera empleaba cuerdas y botes de goma para evacuar a la gente atrapada en sus casas por aguas turbias que llevaban a la cintura en una aldea del municipio de Bacarra, en Ilocos Norte, según los guardacostas.

Responsables de gestión de emergencias dijeron estar comprobando los reportes de una mujer ahogada en un arroyo crecido el lunes en Cardona, al sureste de Manila, cuando el tifón se aproximaba desde el Pacífico.

El tifón ha agravado las lluvias estacionales del monzón en las provincias del centro y el norte de Filipinas, como la populosa región metropolitana de Manila. Se esperaba que el sistema se alejara del norte de Filipinas el jueves y pasara rozando el suroeste de Taiwán antes de golpear el sureste de China más tarde esta semana.

Aunque las previsiones no apuntaban a un impacto directo, las bandas exteriores de la tormenta llevaron vendavales y aguaceros a la costa oriental de Taiwán el miércoles. Se cancelaron los trenes entre las ciudades de Kaohsiung y Taitung y se suspendió el servicio de transbordadores en las islas exteriores.