Un intérprete del presidente chino, Xi Jinping fue detenido durante la cumbre de líderes del BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) luego que la seguridad del evento pensara que se trataba de un asesino.

El suceso fue captado en video y se ha vuelto viral en redes sociales.

En las imágenes se ve al traductor de Xi corriendo hacia el presidente chino tras haberse quedado rezagado unos instantes en su ingreso junto al mandatario. La premura del hombre generó sospechas entre los integrantes del cuerpo de seguridad, quienes lo detuvieran bruscamente.

Instantes antes de que el intérprete -identificado como Sun Ning- pudiera alcanzar a Xi, un guardia lo acorraló contra una de las puertas del auditorio y ambos empezaron a forcejear. Detrás de Sun apareció un segundo guardia, quien lo tomó por uno de sus hombros para impedir aún más su ingreso.

Finalmente, entre ambos lograron apartar al traductor de la entrada y cerrar las puertas. Sorprendido por la ausencia de su intérprete oficial a su lado, Xi se dio vuelta, miró hacia el ingreso y se dio cuenta de que lo habían dejado fuera. A pesar de ello, el líder continuó con su camino como si nada hubiese ocurrido.

Según reconstruyó The Guardian, no se trata del primer confuso suceso en el que se ve envuelto el presidente chino desde su arribo a Johannesburgo.

El martes pasado, Xi se saltó inesperadamente un discurso programado en un foro empresarial multilateral clave. Según el calendario de la cumbre, se esperaba que el mandatario asistiera al foro y pronunciara comentarios junto con otros líderes. Sin embargo, su mensaje fue leído en voz alta por su ministro de Comercio, Wang Wentao.

Horas después, el jefe de Estado se presentó en la cena de la cumbre sin ofrecer ninguna explicación respecto a su ausencia previa. Medios locales especulaban con la posibilidad de que hubiera sido un “cambio de último minuto”, debido a que Xi “se estaba sintiendo mal” o se encontraba “temporalmente enfermo”.

Durante su alocución el miércoles, el líder chino bregó por la aceleración de la expansión del grupo BRICS, un objetivo que la segunda economía más grande del mundo albergó durante mucho tiempo. Al dirigirse a una cumbre de líderes, Xi dijo que estaba contento por el gran entusiasmo de otros países de participar en los Brics.