El inspector Jorge Quiñones, comandante de la zona de Río Piedras, declaró este lunes en la noche que el uso de gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes frente a los portones de La Fortaleza se dio luego de que los agentes destacados en el lugar hubieran sido agredidos con objetos contundentes.

“Constantemente, (nos lanzaron) piedras, cherry bombs, cuartos de dinamita y botellas de agua. Ellos detonaron los cuartos de dinamita dentro del área de formación de la Policía”, explicó Quiñones en una improvisada conferencia en la sala de prensa de La Fortaleza.

“Nosotros simplemente estamos respondiendo a la agresividad de ellos y la agresión de ellos hacia nosotros”, agregó.

La situación comenzó pasada las 8:00 p.m., cuando se comenzaron a escuchar detonaciones de lo que se presume eran cuartos de dinamita. También se escuchaban golpes sobre las vallas anaranjadas que marcaban el perímetro, lugar donde hubo encontronazos entre policías y manifestante. Luego de varias advertencias, la Policía lanzó gases lacrimógenos contra la multitud.

Minutos después de esta ronda de gases, se suscitó un incidente entre los manifestantes y policías que estaban apostados en la calle San Francisco. En el confuso suceso, las personas que protestaban y que habían sido afectadas por los gases que tiraron en la calle Fortaleza trataron de mover la valla y les lanzaron objetos a los guardias. La situación no escaló a mayores, luego que las personas se fueran del lugar.

De la misma forma, manifestantes aseguraron en las redes sociales que las autoridades dispararon balas de goma. En cambio, Axel Valencia, portavoz de la Policía, dijo que no podía corroborar eso.

El oficial aseguró que la Uniformada cumplió con el protocolo para manejar multitudes que le impuso la Reforma de la Policía. “Fueron advertidos y se les orientó en varias ocasiones y en repetidas ocasiones de cese y desista de la actitud de confrontación y de que no queremos confrontación. Pero lamentablemente...”, indicó Quiñones.

Asimismo, aclaró que el camión de bomberos no era para dispersar manifestantes, sino para cualquier incidente en que hubiera un incendio. “Eso no existe en la política (el uso de agua para dispersar manifestaciones) ni existe en nuestras mentes. En la Policía eso no existe como tal”, argumentó Quiñones.