El niño de origen dominicano que pernoctaba en un hotel de Manatí y que ayer fue reportado como secuestrado presuntamente por su padre biológico, apareció tarde anoche solo cerca de una gasolinera en Carolina, informó la Policía.

Jensy Roberto Alexis, de 12 años y residente del municipio Higuey, fue visto por última vez la noche del domingo en el Hotel Hyatt de Manatí.

Según la agente Wanda Vázquez, de la oficina de prensa de Arecibo, anoche un guardia de seguridad fue quien vio al menor solo en una gasolinera cerca del centro comercial Plaza Escorial y alertó a la Policía.

El menor fue llevado en primera instancia a un cuartel de Carolina, de donde fue llevado a la Comandancia de Arecibo y también a un hospital para cotejar su estado de salud.

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El próximo paso es “llevarlo al cónsul dominicano y ellos se van a hacer cargos de él y devolverlo a la República”, precisó.

Según las autoridades, el menor se encontraba con un adulto identificado como Jensy Salasar, que indica ser su padre.

El menor está en la Isla junto a otros jovencitos participando de varios juegos de béisbol. Los participantes regresarían ayer a República Dominicana.

La agente Vázquez no pudo precisar qué va a pasar en términos de la investigación policíaca.

Por su parte, el c?ónsul de la República Dominicana en la isla, Franklin Grullón, dijo en Noticentro 4 que fue el padre quien dejó al menor en la gasolinera.

“Aparentemente la persona se asustó… no quiso llevarlo a un cuartel pero lo dejó cerca y se comunicó para que lo recogieran”, indicó Grullón.

Agregó que se desconoce el paradero del supuesto padre. El hombre no ha reconocido formalmente al jovencito como su hijo.

El cónsulo dijo que ya hay comunicación con el Ministerio de Relaciones Exteriores de su país para el traslado del menor de vuelta a República Dominicana, y que se encontraba legalmente en Puerto Rico con una visa de tres meses.

Dijo que todo apunta a que el padre biológico y la madre del menor habían consentido a que el menor se quedara en Puerto Rico, pero la mujer perdió contacto con el padre y alertó a las autoridades.

“La madre estaba consciente de lo que estaba pasando”, dijo el cónsul.

Explicó que le corresponde a las autoridades de República Dominicana decidir si procede alguna acusación contra la madre y a las de Puerto Rico si el supuesto padre -porque no lo ha reconocido formalmente-  debe enfrentar algún cargo.