Ayer falleció el cuarto de los jóvenes entre las edades de 18 a 22 años que fueron acribillados el sábado en lo que constituye la más reciente masare relacionada con el trasiego de drogas.

Según informó el comandante de área de Bayamón, el coronel Reinaldo Bermúdez, a eso de las 12:30 de la tarde del sábado un grupo de jóvenes se encontraba sentado en el callejón Juancho López de la barriada Sabana, en el barrio Amelia, de Guaynabo, cuando llegó un sujeto, vestido de negro con gorra y gafas del mismo color.

Sin mediar palabra el hombre sacó un arma que no fue descrita y tiroteó al grupo que allí se encontraba.

“Estaban presuntamente ahí sentados hablando de ir al cine, aunque realmente el lugar es un punto de drogas, cuando llega este individuo y les empieza a disparar”, explicó Bermúdez.

De su parte, el jefe de Homicidios de Bayamón, el teniente Edilberto Rivera, dijo que uno de los ángulos pudo ser la venganza por la muerte de un joven de la comunidad ocurrida en mayo.

En la matanza resultaron ultimados Carlos Omar Cabrera, de 21 años, quien tenía antecedentes criminales por violación a la Ley de Armas, y Angelo Rivera Montalvo, de 20, fichado por apropiación ilegal y vehículos hurtados. También fallecieron Johnny Reyes Salas, de 22 años, y Leonardo Pla Suero, de 18.

En medio del tiroteo resultó herido de gravedad Francisco Ventura Rodríguez, de 23 años, vecino de la barriada Vietnam. Éste presentaba heridas de bala en la pierna derecha con entrada y salida y otros impactos de proyectil en la cabeza.

Ayer el joven Ventura era sometido a cirugía en el Centro Médico de Río Piedras. Ventura había sido fichado por robo y violación a la Ley de Armas.

También resultó herido Gustavo Concepción Salas, de 21 años, vecino de dicho barrio. Éste sufrió una herida de proyectil en el brazo derecho y se encuentra en el Centro Médico de Río Piedras.

La Policía investigaba ayer las circunstan cias que llevaron a este hecho de violencia.

Se baraja la droga como móvil principal de estos asesinatos, ya que en el área se encontraron cápsulas y sobrecitos donde se empaqueta la droga. En la escena se ocuparon múltiples casquillos de bala calibres .40 y 45.