La jueza María del Pilar Vázquez, del Tribunal de Primera Instancia de Mayagüez, determinó causa para arresto por 35 cargos de asesinato en primer grado, tentativa de asesinato, violaciones a la Ley de Armas, destrucción de pruebas y conspiración, atentados o amenazas contra funcionarios del sistema de justicia, contra Pablo Omar Pérez Lugo, Joshue Ramón Ortiz García y Enrique Manuel Valentín Díaz, por el crimen de Jason A. Santiago Rivera de 36 años y un ataque a tiros que dejó a dos policías heridos.

Los imputados serán encarcelados al no prestar una fianza global que asciende a $20.5 millones.

Los cargos fueron radicados por los fiscales Andy Rodríguez Bonilla, Yamilza Vázquez Cuevas y Gerardo Martínez Rodríguez.

A solicitud de los fiscales, el tribunal autorizó la revocación de una probatoria que cumplía Pérez Lugo por una condena previa.

“Como secretario de Justicia, expreso mi total solidaridad y deseo de pronta recuperación a los agentes que fueron víctimas de este vil ataque. Asimismo, nuestras condolencias a la familia del joven occiso. Los responsables de estos actos criminales enfrentan la justicia desde hoy. El mensaje es claro para todo aquel que atente contra los funcionarios del orden público, no habrá impunidad, serán procesados”, sostuvo el secretario del Departamento de Justicia, Domingo Emmanuelli Hernández, en un comunicado de prensa.

La cadena de eventos comenzó a las 11:34 a.m. de este martes, cuando se reportó una balacera en el residencial Franklin D. Roosevelt, en Mayagüez. A este llamado de alerta respondieron el agente Radamés Miranda Pérez y el sargento Luis R. Aponte García, topándose con un vehículo Hyundai Tucson, color negro, en el que viajaban varios hombres armados, a quienes les dieron la señal del alto la cual ignoraron, iniciándose una persecución.

La misma culminó en el kilómetro 0.8 de la carretera PR-349 del sector La Chorra de ese municipio, donde los gatilleros se bajaron y abrieron fuego contra el vehículo confidencial marca Toyota Corolla blanco.

Los sospechosos trataron de ocultarse en la urbanización Villa Sol en Mayagüez, donde Pérez Lugo de 21 años y residente en Añasco y Ortiz García de 25 años, de Hormigueros, fueron arrestados y se ocuparon armas de fuego. También se incautó el vehículo que abandonaron.

Mientras tanto, un automóvil marca Nissan Sentra, color negro, que salió del residencial hacia el Centro Médico en Mayagüez, fue detenido por la Unidad Motorizada de la División de Patrullas de Carreteras, antes de entrar al hospital y se ocupó una pistola Glock calibre 9 milímetros cargada con 11 balas. En el vehículo era transportado por dos hombres, Santiago Rivera, quien murió mientras recibía asistencia médica.

Tras una intensa búsqueda, durante la tarde de hoy, se entregó a las autoridades en la oficina de un abogado, Valentín Díaz, alias “Moustro”, de 22 años y vecino del residencial Mar y Sol en Mayagüez, por la mediación de su padre.

Por su parte, el secretario del Departamento de Seguridad Pública, Alexis Torres Ríos, se expresó optimista sobre la condición y la eventual recuperación de los dos oficiales heridos, tras conversar con ellos en el hospital.

Horas más tarde, al culminar un círculo de oración en la plazoleta del Centro Médico de Puerto Rico en Río Piedras, encabezada por miembros del Negociado de la Policía de Puerto Rico y sus capellanes, la hija del sargento, Linda Marie Aponte, agradeció el apoyo que ha recibido su familia desde que su padre resultó herido.

“Nuestros policías son unos guerreros, simplemente hay que apoyarlos. Puerto Rico necesita mejores recursos, mejores policías, vamos a ayudarlos, ¿qué ustedes creen? Y así podemos combatir la criminalidad para que no vuelva a suceder esto. Que sea una primera y una última vez. Basta con los sufrimientos, noticias falsas por ahí y mucho ajetreo y mucho problema con todo el mundo”.