“Me he sentido un poco nervioso y con temor”.

Ni la determinación de causa probable contra su agresor le ha devuelto la tranquilidad a un adolescente de 16 años, estudiante de la escuela superior Dra. Conchita Cuevas, de Gurabo, quien fue objeto de una golpiza frente al plantel el 23 de noviembre mientras se llevaba a cabo la tradicional Carreera del Pavo.

Ayer , el juez Edwin Flores, de la Sala de Investigaciones de Caguas, encontró causa para arresto contra Gonzalo Rivera Flores, de 19 años, por cargos de agresión agravada y contra su padrastro, Joel Torres Quiñones, de 40 años, por el delito de socio cooperador. Les señaló una fianza global de $13 mil, la cual prestaron.

El juez les instruyó en corte abierta a los imputados no acercarse ni al menor ni a los testigos, reveló el fiscal Obdulio Meléndez Torras.

Rivera Flores y Torres Quiñones, son hermano y padrastro, respectivamente, de un alumno de 16 años, estudiante de la escuela, quien tuvo problemas con la víctima. En represalia, el jovencito fue interceptado el día de los hechos para cuestionarle al respecto.

Según la prueba presentada por el fiscal, el día de los hechos Torres Quiñones le increpó a la víctima en torno a un altercado que tuvo con su hijastro y éste le indicó que no le interesaba pelear con él, que lo dejara tranquilo.

Sin embargo, Rivera Flores, se le acercó y le dio una bofetada en el rostro y comenzó a golpearlo.

“Le dio una bofetada en la cara y le entró a puños, a golpes contra él en presencia de Torres, que no hizo nada para evitarlo. Luego llegaron los agentes municipales, que lograron separarlos”, detalló el fiscal.

Al menor le tomaron cuatro puntos de sutura en la cabeza.

Según la versión ofrecida por la madre del estudiante agredido, Dorcas González, el altercado ocurrió cuatro días antes de la agresión. Ésta explicó que el hijastro de Torres pasó por el lado de su hijo y le dio un golpe en la espalda, porque supuestamente “no se lleva bien con él”.

La investigación se había estancado ya que el policía municipal que inicialmente atendió el caso y que según testigos exhortó a Rivera Flores a que abandonara el lugar para evitar problemas, no redactó una querella sobre la agresión, ni tampoco lo reportó en el libro de novedades del cuartel.

A pesar de las advertencias del juez a los imputados para que no se acerquen al menor, González indicó que acudirá al tribunal para solicitar una Orden de Alejamiento contra los acusados.